Los consejos básicos para iniciarte en el ciclismo de montaña cumplidos los 60

Montar en bicicleta es un ejercicio que, salvo contraindicación médica, puede practicarse y es recomendable a cualquier edad, porque son muchos los beneficios que aporta al organismo. Es un deporte aeróbico, que incrementa la capacidad pulmonar y acelera el ritmo cardiaco, por lo que siempre debes adaptar su nivel de exigencia a tu propia condición física.

El ciclismo de montaña reúne todas las buenas propiedades que aporta el pedaleo en cualquier lugar, pero puede llegar a ser un ejercicio bastante más duro e intenso que el que supone llevar la bici por asfalto. En este sentido, la Fundación Española del Corazón (@cuidarcorazon) insiste en la importancia de consultar con el médico para estar seguros de que no existe problema alguno de salud que desaconseje su práctica.

Ciclismo de montaña, ¿por dónde empezar?

Si estás dispuesto a iniciarte en el mountain bike, debes saber que este deporte “engancha”, porque disfrutar de los senderos que ofrece la montaña, pedaleando a tu ritmo sobre tu bici, es una experiencia de lo más gratificante en todos los sentidos. No solo harás un ejercicio completo, sino también podrás desconectar y aliviar cualquier situación de preocupación o estrés.

Subirte a la bicicleta de montaña y disfrutar de un agradable paseo, no depende de que hayas pasado los 65 años, sino de tu forma física general. Si eres una persona activa, que practica regularmente otros deportes como parte de un envejecimiento activo, no hay problema en empezar el pedaleo en montaña, pero pasar del sedentarismo total, al mountain bike no es conveniente.

Si este segundo caso es el tuyo, no te preocupes, también podrás practicar esta bonita actividad, pero deberás dedicar, previamente, unas semanas a ponerte en forma. Ejercicios aeróbicos como caminar a buen ritmo o correr a marcha suave o acudir a un gimnasio, donde puedas seguir una rutina sobre la elíptica, haciendo, además, algún entrenamiento suave de fuerza, te darán la preparación suficiente para afrontar el nuevo reto con garantías.

Contar con el equipo adecuado es también básico para practicar el ciclismo de montaña con seguridad. Necesitas una bicicleta específica, con una buena amortiguación, para disfrutar de esta modalidad de ciclismo. Complementos como un calzado apropiado y el fundamental casco también son esenciales, al igual que unas gafas que protejan tus ojos.

Por último, la seguridad a la hora de hacer este deporte es lo primero. Empieza controlando tu esfuerzo y elige rutas sencillas, mejor senderos MTB, perfectamente señalizados y pensados para que cualquier persona pueda transitar por ellos con su bici de montaña. Siempre es aconsejable que, al menos en tus primeras rutas, vayas acompañado.