65ymás
Una investigación llevada a cabo en el Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA) de la Universidad de Navarra ha descubierto que la inhalación de mentol podría producir una “mejora” en la capacidad cognitiva de los humanos.
Los científicos han confirmado que "tiene unas propiedades capaces de modular el sistema inmune".
Además, tal y como se explica en la página web del CIMA, con una exposición prolongada y sostenida en el tiempo, esta sustancia puede prevenir este deterioro característico de enfermedades como la demencia o el alzhéimer.
La demencia y el olfato
Esta patología engloba varias enfermedades que se manifiestan con el deterioro de la cognición, la memoria o el pensamiento. Hay multitud de estudios que han tratado de ponerle remedio o paliar los síntomas, a través de una rápida detención.
El equilibrio funcional del cerebro depende de interacciones que se producen entre varios tipos de células nerviosas, inmunitarias y células madre neurales.Varios estudios han analizado los efectos inmunomoduladores y neurológicos de esta compleja red de interacciones.
Otros trabajos previos han mostrado la existencia de una correlación entre la pérdida del sentido del olfato y la aparición de los primeros síntomas en la enfermedad del Alzheimer.
El mentol: mejorar la capacidad cognitiva y prevenir el deterioro
El Dr. Juan José Lasarte es investigador del Programa de Inmunología e Inmunoterapia del Cima y autor principal de la investigación.
Ha señalado que “nosotros nos hemos centrado en el papel que el sistema olfativo puede tener en el sistema inmunitario y en el sistema nervioso central y hemos confirmado que el mentol es un inmunoestimulante en los modelos animales.“
Para llegar a esta conclusión, llevaron a cabo un análisis con ratones en el que pudieron ver que "al oler ese aroma se reducían los niveles de una proteína clave en mediar la respuesta inflamatoria, la interleucina-1-beta (IL-1β)".
Los ratones inhibieron esta proteína con un fármaco aprobado para el tratamiento de algunas enfermedades autoinmunes, y consiguieron mejorar la capacidad cognitiva de estos animales.
Además, tal y como asegura el doctor Lasarte, se sorprendieron al observar que la exposición a esta sustancia durante seis meses previno el deterioro en los ratones con alzhéimer y favoreció a la cognición de ratones jóvenes sanos.
Así, los investigadores comprobaron que oler esta sustancia modula el sistema inmune y mejora la capacidad cerebral en modelos animales de esta enfermedad neurodegenerativa.
Este estudio abre la puerta al desarrollo de nuevas terapias para prevenir o aliviar los efectos del alzhéimer y otras enfermedades del sistema nervioso central