¿Cuál es el consumo de calcio recomendado?

Un exceso de calcio en nuestra alimentación no es perjudicial para el organismo a menos que tengamos alguna enfermedad que favorezca el incremento de este mineral en la sangre, en cuyo caso, será necesario restringir su consumo.

El calcio es fundamental para mantener los huesos y dientes en buena forma, así como para el correcto funcionamiento de otras partes de nuestro organismo como puede ser la contracción muscular, la coagulación de la sangre, los latidos del corazón o el sistema nervioso.

¿Qué ocurre si tengo déficit de calcio?

La falta de calcio en nuestra sangre puede ser por motivos genéticos o bien por un aporte bajo. La primera consecuencia de esta escasez en nuestro organismo es la osteoporosis.

El calcio es muy importante para evitar problemas dentales, neuromusculares o de presión arterial.

Hipercalcemia o exceso de calcio en sangre

Tener un exceso de calcio en sangre, conocido como hipercalcemia, también puede ser perjudicial para nuestra salud, ya que puede causar problemas como estreñimiento, náuseas, vómitos, dolor abdominal, debilidad muscular, apatía, depresión, irritabilidad, confusión, dolor en los huesos, mayor frecuencia para orinar, etc.

El exceso de calcio en sangre suele ser producido por un hiperparatiroidismo primario, que es el responsable de la secreción de hormonas que remueven el calcio de los huesos. Patologías como la insuficiencia de glándulas suprarrenales, insuficiencia renal, hipertiroidismo, cáncer de pulmón o mama, entre otros, también pueden estar detrás de un exceso de calcio en sangre.

La hipercalcemia, que afecta a cerca de un 1% de la población, no es generalmente una consecuencia de un alto consumo alimenticio, a menos que diariamente se consuma de manera desmedida suplementos de calcio y vitamina D que superen los 2000 mg diarios de calcio, lo que sí podría ser un causante.

Por lo tanto, la falta o el exceso de calcio en sangre no está directamente relacionado con la alimentación, ya que puede ser consecuencia de muchos otros factores o patologías. No obstante, siempre es necesario un equilibrio y consumo medio de calcio para la salud de nuestros huesos y resto del organismo, pero sin llegar a suplementos o cantidades abusivas que puedan llegar a ser contraproducentes.

¿Cuál es el consumo recomendado?

Aunque la ingesta media de calcio en una persona adulta debe ser entre los 800-1000 mg de calcio diario, hay etapas como la menopausia o a partir de los 70 años donde es necesario un aporte mayor.

Además de los lácteos como la leches, yogures o quesos, el calcio está presente en alimentos de hoja verde, legumbres, frutos secos o sardinas, entre otros.