Ignacio Casanueva
Ignacio Casanueva es redactor especializado en temas de tecnología y salud.
… saber más sobre el autorLas migraciones en el mundo animal se corresponderían con los viajes que realizamos los seres humanos cada verano. Nos desplazamos para estar un tiempo en un ambiente mucho más agradable en el que solemos movernos y con el tiempo nos volvemos.
En el caso de la fauna los tiempos varían, pero la teoría seria igual. Excepto cuando una especie llega a un entorno nuevo y decide quedarse. En este caso hablamos de especies invasoras, porque el efecto de ésta sobre ese hábitat no estaba controlado. Un desajuste en el ecosistema cuyas consecuencias afectan tanto a la flora como al resto de la fauna, y por consiguiente al ser humano.
Una de las especies invasoras que más ha dado de qué hablar durante los últimos años es la avispa asiática. Se trata de una avispa que proviene de Asia, concretamente de la zona norte de India, colindante con China. Su alimentación se basa en otros insectos que habitan en los cambios, incluyendo en su dieta a las abejas. Es aquí cuando su impacto se ve en el ecosistema ya que elimina al principal polinizador animal. La avisa asiática, o “vespa velutina” utiliza su carne para alimentar a las larvas, además de atemorizar a estas abejas las cuales no salen de su nido y dejan de poner huevos.
Desde su entrada en España, hace casi 5 años, no han superado la decena las personas que han fallecido a causa de su picadura. Y es que, a pesar del imaginario común, no representa más peligro para el ser humano que las especies autóctonas (siempre que no seamos alérgicos). Ambas especies atacan a las personas para defender sus nidos, diferenciándose la cantidad de veneno que inyectan ya que, por tema de tamaño, la asiática tendrá más concentración.
Otra especia invasora la podemos ver en el mosquito tigre. El problema con este mosquito ya no es erradicarlo, sino controlar su expansión. La primera aparición registrada fue en Cataluña en 2004, pero poco a poco se ha extendido al resto del país. Todos los veranos es un problema para las personas porque según los expertos cada vez “llega antes” y se alarga su pico de actividad. Y es que su picadura puede transmitir 22 virus diferentes como el dengue, el chikungunya, la zika o el virus del Nilo Occidental, entre otras.
Por último, otra especia invasora que está causando estragos en América es la polilla gitana. De origen euroasiático este insecto se ha adaptado al nuevo continente, haciéndose más resistentes y comenzando a destruir bosques y cultivos. Su rapidez de procreación les lleva a depositar más de 100 huevas por animal, además de ser capaces de masticar más de 500 especies de árboles y arbustos diferentes.
Toda la naturaleza está en equilibrio, y cuando una especie comienza a repuntar, siempre habrá un tiempo en el que la balanza vuelva a su posición. Mientras tanto las personas deberemos aprender a convivir con este cambio.