La estética oncológica es una práctica indicada para mejorar el estado físico y emocional de los pacientes de cáncer y paliar algunos de los efectos secundarios negativos que provocan los tratamientos para superar la enfermedad. El proceso por el que deben pasar estos enfermos es sumamente duro en todos los aspectos y suele tener repercusiones en otros ámbitos de la salud. Uno de ellos es la piel, que se resiente mucho al pasar por experiencias como la quimioterapia, la terapia dirigida o la hormonoterapia y necesita también un tratamiento personalizado. Este es uno de los motivos por el que la estética oncológica se ha convertido en un servicio muy utilizado en países como Estados Unidos y ahora se va extendiendo hacia otros, como España.
No se trata de una práctica puntual, sino de un proceso que pretende cuidar la piel del paciente en las diferentes etapas de su enfermedad. Al principio, se dedica a prepararla para los posteriores tratamientos de radio y quimioterapia. Mientras el tratamiento médico está en marcha, los cuidados de la estética oncológica también ayudan a mantener la piel y a minimizar los daños. Finalmente, cuando el paciente termina su terapia, dichos cuidados continúan. De esta manera, el paciente es atendido durante toda la enfermedad de manera personalizada.
Superar la angustia
El estado anímico del paciente se puede igualmente alterar durante el tratamiento para superar un cáncer. En este sentido, la estética oncológica tiene entre sus objetivos ayudarle a aumentar su autoestima y hacerle sentir mejor. Con sus prácticas, los pacientes adquieren maneras positivas de afrontar su enfermedad y aprenden a cuidarse a si mismos mediante masajes circulatorios o cursos de maquillaje, por ejemplo.
A diferencia de los procesos médicos habituales por los que deben pasar los pacientes y que se llevan a cabo en el hospital, la estética oncológica, tal y como indica su nombre, se practica en centros de estética. Cada vez son más los profesionales que deciden especializarse en estética oncológica y acompañar a los pacientes con cáncer a superar su tratamiento de la mejor manera posible.
En esta línea, la Fundación Ricardo Fisas Natura Bissé lleva trabajando desde hace más de diez años en dar visibilidad a la estética oncológica y promover su implantación en los centros de belleza españoles. Desde su creación, en 2008, por parte de Ricardo Fisas y Gloria Vergés, la fundación asegura haber enseñado a más de 1.200 esteticistas mediante una formación integral que cuenta con la participación de oncólogos, dermatólogos y psicooncólogos. El equipo de la Fundación pone su experiencia al servicio de los alumnos, con conocimientos adquiridos tras realizar cerca de 10.000 tratamientos de estética oncológica personalizados gratuitos en hospitales y asociaciones de pacientes. Y es que cuando los enfermos de cáncer reciben su tratamiento, las prácticas de estética oncológicas les pueden ayudar a superar la angustia ocupándose de su aspecto físico, algo que siempre puede ayudar a recuperar la autoestima.
