Un estudio relaciona la fuerza muscular y la salud mental en personas mayores

La fuerza muscular y la salud mental podrían estar más relacionados de lo que parece, especialmente en las personas mayores. Y es que, según un nuevo estudio elaborado por el Instituto de Investigación Biosanitaria de Granada (ibs.GRANADA) y la Universidad de Granada, en colaboración con el Instituto de Investigación Biomédica de Málaga y Plataforma en Nanomedicina (IBIMA Plataforma BIONAND), la fuerza muscular tendría un "rol relevante" con problemas de salud mental como la ansiedad y la depresión. 

El estudio, publicado en la revista International Journal of Clinical and Health Psychology, forma parte del ensayo aleatorizado controlado ÁGUEDA – Active Gains in brain Using Exercise During Aging e incluyó a 90 personas mayores que estaban cognitivamente sanos. 

A través de varias pruebas y otros indicadores como la Escala Internacional de Aptitud Física (IFIS), se evaluó la fuerza muscular de los participantes, así como diversos aspectos de salud mental, incluyendo la ansiedad, la depresión, la soledad, el estrés, la autoestima, la satisfacción con la vida y el bienestar emocional. 

La Dra. María Rodríguez-Ayllón, investigadora postdoctoral del grupo de IBIMA Plataforma BIONAND Salud Mental, Servicios y Atención Primaria (SAMSERAP), explicaba así, según recoge ibs.GRANADA en una nota, que "nuestros resultados indican que existe una asociación significativa entre la fuerza de agarre y la autoestima, así como entre la fuerza percibida y los síntomas depresivos". 

"Los hallazgos en este estudio subrayan la importancia de mantener una buena fuerza muscular no solo para la salud física, sino también para el bienestar mental en la tercera edad", añadía. 

Por su parte, Darío Bellón, del Departamento de Educación Física y Deportiva de la Facultad de Ciencias del Deporte y del Instituto Mixto Universitario Deporte y Salud (iMUDS) de la Universidad de Granada (UGR), y principal autor del estudio, ha destacado la importancia de estos resultados, ya que "la identificación de la fuerza muscular como un factor modificable puede abrir nuevas vías para la intervención y prevención de problemas de salud mental en adultos mayores, reforzando la necesidad de promover programas de ejercicio físico adaptados a esta población".