65ymás
El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ha destacado este lunes la importancia de mantener las incidencias de contagio de coronavirus "lo más bajas posibles" en el momento el que se inicie el proceso de vacunación, dado que la inmunidad no se adquiere hasta una semana después de haber recibido la segunda dosis. "Durante todo ese tiempo estamos expuestos a una infección. Cuanto más alta sea la incidencia más posibilidad de estar expuesto a una infección, incluso con la vacuna ya puesta", ha sostenido.
"Lo ideal sería entrar en la fase de vacunación con las incidencias menores posibles. Estamos en una situación mucho mejor que la de muchos países de Europa, pero eso significa que cuando estemos en nuestro valle, con posibilidades de aumentar la incidencia, es cuando comenzaremos a vacunar. Espero que no la aumentemos y estemos vacunando con incidencias muy bajas. Corremos ese riesgo", ha explicado Simón en rueda de prensa a pregunta de 65Ymás.
Según el director del CCAES, el problema de llegar al proceso de vacunación con una incidencia alta es que "puede haber personas que se hayan infectado el día antes de vacunarse, se vacunen y unos días después inicien síntomas de la enfermedad y se piensen que la vacuna no funciona, lo cual es completamente falso". En este sentido Simón ha recordado que la vacuna produce inmunidad "una semana después de la segunda dosis".
"El objetivo, por tanto, es mantener las incidencias más bajas posibles, no durante unos días o durante una semana, sino durante el suficiente tiempo como para permitirnos vacunar a un porcentaje importante de la población, sobre todo a los grupos de mayor riesgo. Si no somos conscientes de esta necesidad de mantener la incidencia lo más baja posible sí que corremos el riesgo de tener una tercera ola a partir de mediados de enero, después de las festividades navideñas. Tenemos que ser todos muy conscientes de ello", ha abundado.
Para lograrlo, Simón ha dicho que "no va a depender de prohibir entrar o salir a alguien a una residencia o reducir de 10 a 8 el número de personas que se pueden reunir, sino de mantener las medidas clave: protección personal, protección de los demás con nuestro comportamiento y que cuando alguien inicie síntomas, por leves que sea, se autoaisle y se lo comunique a Atención Primaria, y sus contactos se pongan en cuarentena inmediatamente".
"Si todos somos conscientes de eso y lo aplicamos correctamente, podremos mantener la incidencia baja, pero la posibilidad de una tercera ola está ahí y no la podemos negar", ha apuntando, sin descartar que pueda haber algún cambio en el plan de Navidad anunciado por el Gobierno. "En todo caso, si cada uno toma las medias adecuadas, no tiene por que ser un riesgo excesivo", ha agregado.
"Estamos en una situación delicada"
Por otra parte, el epidemiólogo del Ministerio de Sanidad ve una "posible estabilización" en el descenso de casos de Covid-19 que se estaba produciendo en las últimas semanas, pero ha puntualizado que todavía no se ha observado un impacto de la mayor movilidad registrada durante el Puente de la Constitución. Las cifras de este lunes muestran un aumento del número de contagios con respecto al mismo día de la semana anterior. En concreto, las comunidades autónomas han notificado a Sanidad 21.309 nuevos casos de COVID-19 este fin de semana, frente a los 17.681 del lunes anterior.
"Podría estar estabilizándose ese descenso continuo de las últimas semanas. Sí que estamos observando un aparente estancamiento, probablemente debido a la reducción de las medidas previo al Puente de la Constitución. Estamos en una situación delicada, esperemos que no vuelva a haber incrementos importantes, pero no podemos descartarlos", ha argumentado. De esta forma, ha indicado que los días festivos del Puente de la Constitución todavía no se han plasmado en los datos: "Todavía no hemos observado, si es que lo ha habido, un posible efecto del Puente de la Constitución, que se empezará a observar en los próximos días".
En este sentido, ha esgrimido que, "entrando ya en la Navidad y partiendo de un punto inicial más alto que hace unos meses", el riesgo de saturación de los hospitales "sigue estando ahí" y es "superior" al que desean los expertos del Ministerio de Sanidad. Simón ha detallado que es posible que el alza de las cifras se deba a los días festivos de la semana pasada, pero no lo ha asegurado: "Hasta que no podamos valorar la situación en una semana más normal, como esta, no sabremos el impacto que tiene en la evolución de la pandemia".
Sobre el objetivo al que llegar a la Navidad, Simón ha reconocido que no se va a cumplir la meta de 25 (casos por cada 100.000 habitantes), fijada por la OMS como umbral de control del virus. "No bajaremos hasta los 50, pero podríamos estar si todo va bien en 150. Pero tenemos que ser muy conscientes, y llega la vida social y la gente se relaja. Espero, como mínimo, que no subamos", ha indicado.