Mariola Báez
Fisioterapia
Ejercicios para tratar el síndrome del músculo piramidal o falsa ciática
Mariola Báez
Foto: Bigstock
Jueves 2 de abril de 2020
ACTUALIZADO : Jueves 20 de mayo de 2021 a las 10:56 H
3 minutos
La fisioterapia puede aliviar esta patología de origen muscular pero que afecta al nervio ciático
El llamado síndrome del piramidal es una patología que puede llegar a ser dolorosa e invalidante y que no siempre es sencilla de determinar con claridad, porque presenta síntomas muy similares a los de una ciática, aunque su tratamiento y pronóstico sean muy distintos.
El nervio ciático es uno de los más grandes y largos de todo el cuerpo humano. Parte de la propia médula espinal, en la zona baja de la espalda, y recorre las extremidades inferiores hasta llegar al talón. En su recorrido, el nervio puede verse dañado por distintos motivos, provocando dolores más o menos intensos, que van desde el área lumbar hasta la pierna. La Sociedad Española de Medicina Interna (@Sociedad_SEMI) deja claro que hablamos de ciática cuando es la raíz del nervio ciático la que resulta dañada, generalmente a consecuencia de una hernia discal.
En el síndrome piramidal, la columna y los discos vertebrales no tienen nada que ver. Es el músculo piramidal, que se encuentra en el camino del nervio ciático, el que se contrae de manera involuntaria y acaba afectándole, haciendo que provoque síntomas muy similares a los de la dolorosa ciática.
¿Cómo identificar el síndrome? ¿Cómo aliviarlo?
Como explican fisioterapeutas que tratan esta “engañosa” dolencia. Es el músculo piramidal o piriforme, pequeño y de forma triangular, que forma parte de la musculatura profunda del glúteo y de la estructura de la pelvis, el que por algún motivo (agarrotamiento, hipertrofia, contractura…) puede acabar afectando al nervio ciático, que pasa justo debajo de él mientras se dirige a la cara posterior del muslo.
Evidentemente es necesario averiguar que patología concreta provoca esos dolores. Como “pista” generalmente en caso de falsa ciática el dolor no avanza más allá de la rodilla, pero no siempre ocurre así. Solo una completa exploración determinará el origen de la dolencia y establecerá el tratamiento más adecuado.
En caso de tratarse de síndrome del piramidal el ejercicio es la mejor terapia a la hora de conseguir que el músculo vuelva a su estado normal y deje de afectar al nervio ciático. Masejes y ejercicios de estiramiento, siempre dirigidos y supervisados por fisioterapeutas, pueden lograr que el músculo elongue lo suficiente para que la contractura desaparezca de forma progresiva y deje de presionar al nervio.
Llevar la rodilla al pecho desde una posición inicialtumbado boca arriba, colocar el empeine de la pierna derecha sobre el muslo izquierdo sentado en una silla, hacer una zancada, sentarte en el suelo con las piernas estiradas y pasar una sobre la otra con la rodilla flexionada... son algunos de los ejercicios habituales para tratar el síndrome, aunque también existe aparatología específica con la que lograr un mayor estiramiento del músculo, mejorando la dolencia en menos tiempo.
En cualquier caso, el dolor que provoca una afección del nervio ciático obliga a acudir al especialista, que determinará el tratamiento o los ejercicios que mejor pueden aliviarte.