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La Agencia Francesa del Medicamento (ANSM) ha alertado de los posibles riesgos que conllevan la ingestión de ibuprofeno y ketoprofeno, medicamentos muy similares entre sí, en el tratamiento de algunas infecciones, especialmente las producidas por estreptococos, que podrían verse agravadas por su ingesta como anginas, rinofaringitis, otitis, tos, infección pulmonar, lesiones cutáneas o varicela.
De hecho, las autoridades sanitarias francesas han solicitado a las europeas una investigación sobre ambos medicamentos y se va a llevar a cabo un análisis colegial de los fármacos para su reevaluación de la relación riesgo-beneficio.
Por el momento, tras dejar claro que no se trata de ninguna crisis sanitaria, la ANSM, que ya realizó sus propios estudios en Tours y Marsella, recomienda la toma de paracetamol antes que el ibuprofeno para tratar procesos febriles o dolorosos.
Los investigadores franceses llevan investigando este asunto desde el año 2000 y en este periodo de tiempo han detectado 337 complicaciones infecciosas con ibuprofeno y 49 con ketoprofeno de carácter severo y que produjeron secuelas e incluso muertes.
Conviene recordar que el uso del ibuprofeno también se cuestionó en su momento para el tratamiento de problemas cardíacos, intestinales y vasculares. No obstante, el ibuprofeno lleva décadas siendo, después del paracetamol, el medicamento más utilizado para el tratamiento de fiebre e inflamaciones o dolores moderados.