
Unas gafas inteligentes ayudan a solucionar la falta de autonomía de los pacientes con glaucoma
En cinco años 8 millones de españoles podrán sufrir una discapacidad visual

Unas gafas que utilizan Inteligencia Artificial y Realidad Mixta pueden ayudar a solucionar los problemas de autonomía de las más de 60 millones de personas en el mundo que padecen baja visión como consecuencia de un glaucoma. La solución es obra de una pareja catalana, formada por un ingeniero y una doctora, que idearon inicialmente la solución para ayudar a su hijo Biel, nacido con una enfermedad autoinmune que provoca baja visión y que después crearon una startup, Biel Glasses, junto a la doctora en Optometría Eulalia Sánchez.
Las gafas han sido ya probadas con éxito y ha iniciado una campaña de financiación para ser comercializadas. Todo aquel que desee colaborar en esta iniciativa puede invertir en ella desde la web Startupxplore, con participaciones mínimas de 500 euros.
Los 4 programas piloto realizados hasta ahora con las gafas, denominadas Biel Smartgaze, han probado una efectividad de más del 95% en evitar obstáculos. La prueba más reciente ha sido realizada en Barcelona y también han sido llevados a cabo proyectos en Tarragona, Reus, Figueres y Motegi, en Japón. Las gafas han demostrado también una mejora de la movilidad de los pacientes en el 80% de los casos en entorno de laboratorio.
La baja visión derivada del glaucoma tiene un elevado impacto sobre la autonomía y la independencia de los pacientes, con consecuencias tanto físicas como psicológicas.
Un estudio publicado en 2024 en Journal of Clinical Ophthalmology and Research encontró que las personas con esta afección presentan altas tasas de depresión (85%), ansiedad (81.7%) y estrés (75%).
En el glaucoma el impacto sobre la movilidad es mayor al haber pérdida de visión periférica. Esta afección es la segunda causa de ceguera irreversible en el mundo, según la Sociedad Española de Glaucoma y su diagnóstico suele venir acompañado de problemas emocionales como la depresión, la ansiedad o el estrés, aumentando su discapacidad visual.
Un informe elaborado por la Asociación Mácula-Retina, en colaboración con oftalmólogos de diversos hospitales españoles y publicado en la prestigiosa revista Health Economics Review ha revelado que en cinco años 8 millones de españoles podrán sufrir una discapacidad visual que puede ser irreversible. Esto supone duplicar el número de casos en una década, con un coste acumulado de 99.800 millones de euros.
La Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, el centro tecnológico LEITAT, el CSIC y la Universidad Politécnica de Catalunya de Barcelona han participado en el desarrollo del dispositivo, que ha sido homologado como dispositivo médico de clase 1 por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS). En el desarrollo de la primera versión ha trabajado un equipo multidisciplinar formado por médicos, ingenieros especializados en inteligencia artificial, visión por computador y robótica y ópticos-optometristas.
Las gafas Biel Smartgaze adaptan la realidad a la visión que les resta a los pacientes, consiguiendo que puedan desplazarse con seguridad. Combinan inteligencia artificial y realidad mixta para analizar el entorno en tiempo real, identificando obstáculos y detectando cambios en el terreno. Además, cuentan con visión zoom, mejora del contraste, adaptación a las condiciones de luz existentes e indicaciones auditivas. Sus creadores ya están preparando la siguiente versión del dispositivo, que reducirá su tamaño y peso e incluirá nuevas funciones como ayuda al cruce de calles y navegación más accesible.

Según Jaume Puig, CEO de la compañía y padre de Biel, “hasta ahora las únicas soluciones para la baja visión han sido los perros guía, los bastones y apps de navegación. Los perros guía cuestan más de 30.000 euros y pasan años hasta conseguir uno. Biel Smartgaze es la solución definitiva para la independencia de estos pacientes”.
Comercialización en Europa y el mundo
Este año, los desarrolladores de Biel Smartgaze tienen previsto iniciar su comercialización en España y en el resto de Europa. En 2026, su objetivo es llegar a USA y Asia y ya disponen de preacuerdos de distribución en España, Dinamarca, Países Bajos, USA y Canadá.