Hospitales de media España se desbordan: "El estallido se puede dar en cualquier momento"

España vive tiempos que recuerdan a la primera ola, o incluso la superan en algunas comunidades con un récord de contagios que han superar los 52.000 casos este pasado fin de semana y casi 20.000 personas hospitalizadas con Covid-19 en España. La situación crítica de los hospitales se acerca peligrosamente al fantasma de un confinamiento domiciliario para frenar la expansión del virus, pese a que la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, lo ha descartado. "No adelantemos fases", ha declarado este martes, mientras invitaba a esperar hasta el próximo 9 de noviembre para evaluar el impacto de las medidas restrictivas impuestas hace unos días por las comunidades autónomas. Sin embargo, son medidas que están sobre la mesa en Asturias, Ceuta o Melilla ante el incremento de la presión asistencial en los últimos días. "Cualquier confinamiento, por corto que sea, va a tener un efecto en la trasmisión", consideraba el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón este martes, quien invitaba a "dar margen al sistema sanitario para mostrar una cierta elasticidad".

Más de una cuarta parte (29,17%) de las UCI de España están ocupadas por pacientes con coronavirus y preocupan especialmente zonas como Melilla (57,14%), La Rioja (56,67%), Aragón (48,18%), Ceuta (47%) o Cataluña (42%). Pero es que incluso otras como Asturias, que se había erigido como ejemplo de buena práctica y control de los contagios, está empezando a sufrir presión hospitalaria, hasta el punto de solicitar al gobierno central un confinamiento domiciliario, tendencia a la que han sumado Ceuta y Melilla. Una opción que ha descartado por el momento Sanidad pero que también barajan otras regiones como Castilla y León o Castilla La Mancha. Aragón, con una incidencia acumulada que supera los 500 casos por cada 100.000 habitantes habla ya de "tercera ola pandémica" e informa de nuevas restricciones de movilidad. 

La situación es peor que en la primera ola en algunas comunidades

"La presión asistencial es muy alta es la mayoría de los territorios, con ligeras diferencias" confirma la doctora María Cruz Martín Delgado, responsable de la UCI del Hospital de Torrejón (Madrid) y ex presidenta de la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (@semicyuc). "Estamos hablando de que hay unos 500 pacientes en UCI en la Comunidad de Madrid, que el año pasado no estaban y aún queda que llegue el frío", aclara Cruz, mientras estima que lo que llegó en octubre a Madrid en esta segunda ola se está ahora extendiendo a otros lugares. "Hay muchos regiones que están al borde de la saturación". 

Una visión que comparte Maria José García, portavoz del sindicato de enfermería SATSE (@Sindicato_SATSE). "Mientras que Madrid parece que viven en estos días un ligero descenso de la presión, comunidades que iban muy bien como Asturias, empiezan ahora a temer por su capacidad hospitalaria que ha marcado récords este fin de semana debido a que tienen menos camas", comenta la portavoz de los Enfermeros. "La situación está siendo incluso peor que en la primera ola en comunidades como Asturias, Andalucía o Navarra a las que no llegó tan de lleno la presión en la primavera pasada debido al estado de alarma y el confinamiento". Hasta ahora el pico más alto de ingresados en Asturias estaba en 383 el pasado 13 de abril. Desde hace unos días, superan los 500. Las hospitalizaciones en UCI, sin embargo, son menores que en los inicios de la pandemia. 

¿Hacia un segundo confinamiento?

Esto se debe según Antonio Cabrera, secretario general de la Federación de Sanidad de Comisiones Obreras (@fssccoo​) a una relajación total de las medidas y una desescalada para salvar el verano, que ahora estamos pagando. "Resulta curioso observar que muchas de las comunidades que ahora lo están pasando peor son costeras, turísticas, o tienen frontera cercana con los lugares de más afluencia y movilidad de viajeros", apunta Cabrera, quien considera que un confinamiento total no es descartable para frenar la presión sanitaria. "En la última semana el ritmo de contagios está empezando a tomar forma de pico, en vez de línea mantenida que observábamos hace unas semanas. La situación es muy preocupante. Si se mantiene en forma de pico, no va a haber camas para todos", apunta Cabrera.  "Estamos resistiendo, pero el estallido del sistema hospitalario se puede dar en cualquier momento de las próximas semanas si no bajan los casos", considera la portavoz de SATSE Maria José García. 

"A partir del 60% de las UCIs hay que tomar medidas, opina, y hay muchas comunidades que ya se están acercando a ello. Creo que no hemos aprendido mucho de la primera ola y estamos volviendo a caer en lo peor de una nueva que puede venir en los próximos días", apunta Cabrera. Un punto en el que no está de acuerdo la doctora María Cruz quien considera que se ha mejorado en cuanto a capacidad de atender a pacientes no Covid. "En primavera sobrevino el problema y nos convertimos en hospitales monográficos de la enfermedad", opina, pero lo que sí apunta es que esta ola es mucho más intensa que la primera. "No es tan alta, ni tan abrupta, pero llevamos ya semanas con cifras altas sostenidas, que a la larga pueden acabar afectando a más gente", considera, por lo que si esta ola será más mortífera es aún una incógnita que se abre en el horizonte, mientras los expertos invitan a no descartar ningún escenario. "Esto va a ser largo, no van a ser solo dos meses como la primera ola", por lo que invita a intentar reducir el desgaste emocional.

Perfil del hospitalizado: Hombre mayor de 65 años

El perfil del paciente hospitalizado con coronavirus en España es el de un hombre mayor de 65 años con hipertensión y diabetes, que, además, presentan la fiebre como el principal síntoma clínico, tal y como se expuso en el Congreso Nacional de COVID-19 y de acuerdo con casos incluidos en el Registro Español de Resultados de Farmacoterapia (RERFAR-COVID19).

El registro -que detalla las características de los hospitalizados en España con la infección y los tratamientos que han recibido y en el que han participado 174 hospitales, casi 1.000 investigadores y 15.000 pacientes- muestra que el 58 % de los ingresados es hombre, con la hipertensión (50%) y la diabetes (22%) como las patologías previas asociadas más frecuentes.​