La teleasistencia a mayores de 80 años bate récords en Barcelona

El 78,5% de las personas que viven solas en Barcelona y que tienen más de 80 años ya dispone del Servicio de Teleasistencia Municipal instalado en su hogar. Esta cifra representa el porcentaje más alto registrado hasta la fecha en este servicio, según el consistorio barcelonés. Según los datos facilitados por el Ayuntamiento de Barcelona (@bcn_ajuntament), durante el año 2020 la teleasistencia contó con 102.919 usuarios, un nuevo máximo histórico que representa un millar de personas más que un año antes. Además, también durante el año pasado se alcanzó un nuevo récord: en total hay instalados en el hogar 31.530 dispositivos de seguridad como por ejemplo detectores de fuego y humo, detectores de gas o de movilidad.

El servicio de atención domiciliaria funciona las 24 horas del día, los 365 días del año y está dirigido a personas mayores, pero también personas con diversidad funcional y personas con valoración de dependencia, aunque en la práctica la gran mayoría de los usuarios tienen más de 75 años. De hecho hay cerca de 20.000 personas mayores que de 75 años que viven solas en la ciudad de Barcelona. Y precisamente a estas personas iba dirigida una campaña específica, que su Ayuntamiento puso en marcha en otoño pasado (en el contexto de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus), para ampliar el número de personas usuarias de este servicio. La campaña consistió en enviar a estas 20.000 personas “locuciones para promover y facilitar el acceso al servicio”. Además, se enviaron, con la misma finalidad, unos 37.000 mensajes de teléfono móvil y también de unas 60.000 cartas a diferentes domicilios.

Más solicitudes de lo habitual

Según el consistorio, como resultado de esta campaña el Servicio de Teleasistencia Municipal registró “casi 3.000 solicitudes de alta más de lo habitual”. Seguramente también ayudó a ello el que se creara por primera vez la posibilidad de pedir el servicio mediante un trámite virtual, “un proceso por el que se han recibido hasta un millar de solicitudes”. Además, se redujo la documentación necesaria para tramitar el alta y se creó un circuito específico con los Servicios Sociales para derivar casos de personas vulnerables y activar el recurso de comidas a domicilio, entre otras medidas.

El servicio de teleasistencia consiste en instalar en la vivienda un sencillo aparato conectado mediante la línea telefónica a una central receptora, con la que el usuario se puede comunicar en caso de urgencia. También se proporciona un colgante que permite a la persona moverse libremente por la casa, incluso ducharse, con la seguridad de poder contactar con la central desde cualquier lugar.