Más de 60.000 personas padecen alguna enfermedad neuromuscular en España

Existen más de 150 enfermedades neuromusculares diagnosticadas, muchas de ellas se detectan en la infancia, pero otras pueden aparecer en cualquier etapa de la vida, incluso superados los sesenta como en el caso de la miastenia gravis, cuya prevalencia entre las personas mayores, se ha incrementado de forma notable según señala la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (@seggeriatria).

Como indica su propio nombre estas enfermedades afectan al sistema neuromuscular, pudiendo incidir en el propio sistema nervioso, central o periférico, directamente en algún músculo o grupo muscular, o también en las conexiones y puntos de unión entre el nervio y un músculo concreto. Aunque cada una de ellas presenta distintos síntomas y evolución, todas tienen un denominador común: la pérdida progresiva de fuerza muscular.

La Federación de Asociaciones de Personas Afectadas por Patologías Neuromusculares (@Federacion_ASEM) explica que se trata de enfermedades crónicas, que generan gran discapacidad y dependencia. En la mayoría de los casos, tienen origen genético, pero algunas son dolencias adquiridas o de carácter autoinmune que pueden surgir a cualquier edad. De los 60.000 casos que se calcula existen en España, un 20% se incluye en el grupo de enfermedades consideradas raras.

 Las enfermedades neuromusculares más comunes

Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), Distrofia muscular, Miastenia gravis, miopatías de distinta índole... son solo algunas de las patologías de este tipo más frecuentes, aunque hay que recordar que existen más de 150 reconocidas.

Las patologías neuromusculares no son algo intrínsecamente ligado al proceso natural de envejecimiento pero también las personas mayores pueden sufrirlas. Como ejemplo, el diagnóstico de la ELA suele producirse entre los 40 y los 70 años. También, el Síndrome Guillain Baré, una enfermedad rara en la que el propio sistema inmunológico ataca por error al sistema nervioso, se encuentra entra las patologías neuromusculares que pueden manifestarse en la edad adulta.

Por su parte, la miastenia gravis es uno de los casos que más preocupa actualmente a médicos e investigadores, al detectarse un claro incremento de la incidencia de esta enfermedad en personas mayores de 65 años, estimándose que el 70% de los nuevos casos detectados en España corresponde a este grupo de población.

Avances para mejorar la calidad de vida

En cuanto a los posibles tratamientos, las investigaciones y estudios se han intensificado en los últimos años. Se trata de enfermedades crónicas y aunque la mayoría no tiene cura, sí se ha avanzado en fármacos y terapias que consiguen retrasar el avance de las distintas enfermedades mejorando de manera notable la calidad de vida de quien las padece. Rehabilitación, fisioterapia, terapia ocupacional… forman parte de la respuesta sanitaria ante estas enfermedades, que también requieren el necesario tratamiento de apoyo  psicológico.