¿Qué tratamientos de mesoterapia pueden resultarte de interés?

La mesoterapia puede emplearse como solución a determinados problemas estéticos y también como tratamiento en distintas patologías, tal como explica la Sociedad Española de Medicina Estética (@SEMEstetica). En cualquiera de los casos, el objetivo es siempre similar: hacer llegar sustancias específicas a las capas medias de la piel para que actúen eficazmente en beneficio del propio organismo.

Centros especializados señalan que, en ocasiones, la mesoterapia puede ser el mejor método para combatir la celulitis o las grasas localizadas, pero también es eficaz a la hora de introducir dosis de medicamentos, vitaminas, enzimas o incluso sustancias de relleno en los tratamientos estéticos de rejuvenecimiento facial.

¿Cómo se realiza un tratamiento de mesoterapia?

Esta técnica de inyección intradérmica resulta, en general, indolora y requiere de un número de sesiones variable según la patología a tratar. La SEME explica que en tratamientos anticelulíticos actúa directamente a nivel del tejido adiposo, consiguiendo reducir la presencia de células grasas (adipocitos). Además, los fármacos empleados en estos tratamientos consiguen mejorar la microcirculación en la zona donde actúan y también, la circulación linfática, lo que favorece no solo la eliminación de grasas, sino de las toxinas acumuladas.

Es importante recordar que la mesoterapia es un tratamiento médico estético que deben realizar médicos especialistas. Antes de aplicar cualquiera de ellos, es necesario un examen previo de descarte cualquier posible efecto secundario no deseado.

Es una técnica poco invasiva que además de servir para tratar la celulitis, también puede ser realmente útil en casos de alopecia (haciendo llegar al cuero cabelludo los nutrientes necesarios para intentar frenar la caída del cabello), flacidez facial o corporal, y relleno de arrugas superficiales.

La mesoterapia es de gran ayuda cuando existen problemas de retención de líquidos, porque permite la inyección directa de aquellas sustancias que pueden mejorar la circulación y favorezcer la movilización y eliminación de los líquidos acumulados. Su eficacia en enfermedades vasculares y linfáticas su eficacia está demostrada.

Aunque no se puede generalizar, la mesoterapia requiere un mínimo de 10 – 12 sesiones, una por semana, y sus resultados empiezan a ser apreciables, normalmente a la tercera o cuarta. Tras la inyección, es habitual la formación de un pequeño hematoma o eritema, que suele desaparecer de forma espontánea.