Mariola Báez
Medicina general
¿La ingesta moderada de vino ayuda a mejorar la densidad ósea?
Un estudio apunta a que un bajo consumo podría reducir el riesgo de sufrir fractura de cadera
Un estudio publicado en la prestigiosa revista The American Journal of Clinical Nutrition ha analizado el efecto que producen determinadas bebidas alcohólicas en la densidad ósea de la cadera y en el mayor o menor riesgo de fractura que una ingesta moderada podría implicar.
Los primeros resultados obtenidos señalan que aquellas personas que realizaron un consumo controlado de este tipo de bebidas, especialmente en el caso de las mujeres que tomaron vino tinto (siempre de forma moderada), presentaron un menor riesgo de fractura de cadera que aquellas que no habían bebido nada de alcohol, en el tiempo de duración del ensayo.
Como recoge la Fundación para la Investigación del Vino y la Nutricion (FIVIN), este estudio profundiza en el papel de los flavonoides presentes en el vino y en sus propiedades antioxidantes a la hora de frenar la acción de los radicales libres, que provocan el envejecimiento oxidativo que puede afectar a la propia densidad de los huesos.
Vino y salud, un tema de eterno debate
Aunque hay opiniones de todo tipo, si en algo están de acuerdo los médicos y especialistas es en afirmar que el consumo de alcohol no es bueno para la salud. Partiendo de esta premisa, algunas bebidas que llevan alcohol, como es el caso del vino, poseen también otros ingredientes y otras propiedades que sí pueden resultar beneficiosas.
En este sentido, el Dr. José Luis Palma Gámiz, vicepresidente de la Fundación Española del Corazón (@cuidarcorazon), señala que los médicos, de manera generalizada, nunca van a recomendar la ingesta de bebidas alcohólicas, pero en aquellos casos en los que no existan enfermedades o patologías que lo desaconsejen expresamente, esa "copa de vino” esporádica podría “ser consentida”.
Mantener una correcta densidad ósea es esencial para prevenir la osteoporosis. Puede que el vino, con sus potentes polifenoles antioxidantes, como el resveratrol y las vitaminas y minerales que aporta, resulte beneficioso en un consumo moderado, pero siempre teniendo en cuenta las características y el estado de salud de cada persona.
En el caso de enfermedades cardiovasculares, diabetes, patologías de carácter neurológico o una medicación específica con la que las bebidas alcohólicas puedan estar contraindicadas, ante la duda, una dieta equilibrada y el cumplimiento estricto del consejo médico son las medidas que siempre habrá que seguir.