Victoria Herrero
Medicina preventiva
La aromaterapia puede ser beneficiosa cuando sufrimos sabañones
Los aceites esenciales de ciprés, manzanilla o almendra dulce pueden aliviar y calmar esa zona
En alguna otra ocasión hemos hablado de los beneficios de la aromaterapia para cuidar nuestra salud de forma natural. Y hoy añadimos un nuevo efecto positivo; en este caso para el tratamiento de los sabañones. Aunque cuando lo leas haga calor, no viene mal tener en cuenta lo que estos elementos naturales a base de plantas pueden hacer para cuidar estas inflamaciones cutáneas que se producen en manos, pies, orejas y nariz como consecuencia del frío.
Gracias a la aplicación sobre la piel de estos aceites esenciales, o de forma oral, podemos calmar esa sensación dolorosa y ese picor que acompaña a esta afección que se manifiesta en forma de un enrojecimiento de la dermis.
Las mejores plantas y remedios de aromaterapia si tenemos sabañones
Esas gotas de aceite esencial nos pueden ayudar a calmar esa zona gracias a sus propiedades antiinflamatorias que, además, favorecen la circulación sanguínea. Así, estas plantas medicinales se pueden aplicar con un uso tópico o bien oral preparándonos unas saludables infusiones. Los más utilizados en este caso son:
- El aceite esencial de ciprés ayuda a tonificar esa circulación venosa, mientras que el de siempreviva amarilla actúa como un potente antiinflamatorio.
- El aceite de almendras dulces tiene un efecto emoliente que relaja y ablanda esa zona dañada, por lo que es conveniente aplicar sobre ese sabañón.
- Otro de los remedios en los que la aromaterapia es la protagonista es aplicar en la zona una compresa mojada en agua caliente e impregnada con unas gotas de aceite de esencial de manzanilla, eucalipto, lavanda o romero.
- Si nos hacemos una infusión de canela y jengibre y la tomamos un par de veces al día, podemos favorecer esa circulación al tiempo que se calienta nuestro organismo.
- Incluso un alimento en su estado puro puede aliviarnos en forma de cataplasmas sobre las manos con sabañones, como ocurre con la cebolla asada o el zumo de limón para curar las cicatrices cuando esos sabañones están agrietados o ulcerados.
La alimentación también puede ayudarnos
No solo las plantas pueden ayudarnos con estos efectos del frío sobre la piel; la alimentación es una buena aliada en este sentido. Es importante optar por alimentos que tengan vitamina C como puede ser la naranja, vitamina E como el germen de trigo o la vitamina A presente en zanahorias, espinacas o espárragos.
Además de estas recomendaciones, es bueno tener en cuenta los principales riesgos que favorecen la aparición de esta afección cutánea como puede ser la humedad en esas zonas del cuerpo, los cambios de temperatura bruscos, el abuso del tabaco o el alcohol, así como la falta de ejercicio físico.