Victoria Herrero
Medicina preventiva
La biodanza, una terapia que puede ayudar a enfermos de Alzhéimer
Una unión, de música y movimientos del cuerpo, de lo más beneficiosa para estos pacientes
En ocasiones, junto a la prescripción farmacológica en el caso del tratamiento de enfermedades, los especialistas establecen una serie de pautas y terapias que no tienen nada que ver con los medicamentos. Hablamos de las intervenciones psicosociales, una forma más amable de mitigar los efectos de ciertas dolencias o mejorar la calidad de vida de estos pacientes.
Y esto es lo que ocurre con la biodanza, una de las soluciones asistenciales más recomendadas en el caso de las personas que padecen Alzhéimer en nuestro país que, según datos de la Sociedad Española de Neurología (@seneurologia), afecta a unas 800.000 personas. Así, gracias a esta conjunción de movimientos y ejercicios al son de la música, se obtienen beneficios más que positivos en el tratamiento de dicha enfermedad.
Los beneficios que experimentan estos pacientes
Debido a este tipo de patología neurológica, las capacidades cognitivas de los pacientes se ven afectadas, por lo que la música es un buen bálsamo para recuperar los recuerdos rotos y esas emociones o sensaciones que les trasladan a épocas pasadas. Gracias a estos acordes y al movimiento del cuerpo (a través de los pies, los brazos o las manos), los enfermos de Alzhéimer encuentran en la biodanza un excelente estímulo para mejorar su calidad de vida.
Como explican especialistas de Sanitas (@sanitas), con la unión de danza y música se activan diferentes áreas de la memoria afectada, evocando recuerdos o sensaciones agradables ya pasadas; además de servir como incremento de la autoestima y una mejora del bienestar y la relajación de estas personas que sufren Alzhéimer. Son solo unos ejemplos de la larga lista de aspectos positivos que la práctica de la biodanza tiene entre estos pacientes:
- Favorece la disminución de bloqueos corporales, así como de la función motora ya que se intenta sigan el ritmo marcado con la música o acompañen esos acordes con palmas o tocando instrumentos musicales.
- Se reduce el nivel de estrés de estos pacientes y aumenta su sensación de vitalidad.
- Facilita la expresión de sentimientos y emociones de forma natural. En este caso resulta aconsejable incentivar a estas personas a que canten y para ello se emplean canciones antiguas de aquellos cantantes o autores favoritos que escuchaban hace años.