'Candida auris', un hongo desconocido que resulta un riesgo para la salud mundial

Candida auris. Este es el nombre del temido superhongo que supone una amenaza para la salud a nivel mundial. Igual así dicho se nos puede escapar el auténtico riesgo de esta bacteria, pero lo comprenderás mejor si te decimos que se trata de un organismo que es resistente a todo tipo de medicamentos. De ahí la alarma en la comunidad sanitaria y científica.

El misterio de su origen

Lo que empezó como un caso aislado hace una década en una paciente asiática se ha ido propagando a otros países como Australia, Venezuela, Rusia, Canadá, China o España, solo por nombrar algunos de ellos. Una "conquista" que ha sorprendido a expertos no solo por esa rápida extensión, sino por la ausencia de pistas acerca de la causa real de su aparición.

Y es que la Candida auris es una bacteria que no sucumbe ante los fármacos que se usan para tratar cientos de infecciones, tampoco se altera ante altas temperaturas, resiste en el medio ambiente y puede sobrevivir en superficies inanimadas. Parece que nada le detiene. 

El riesgo es grave, si tenemos en cuenta que entre el 30% y el 60% de los pacientes infectados con este hongo fallecen debido a las complicaciones que este microorganismo ha podido causar en enfermedades graves que ya habían sido diagnosticadas, como detallan desde la Universidad de Texas (@UTAustin).

Hasta ese dramático momento, este microorganismo puede vivir en la piel de una persona durante meses sin causar problema alguno. Lo malo viene cuando ese Candida auris entra dentro del torrente sanguíneo a través de una herida o en pacientes que tienen el sistema inmunológico debilitado. Las personas mayores son un grupo de población con un alto riesgo en este sentido, sobre todo si se encuentran ingresadas por un patología previa, están en la UCI o tienen nutrición parenteral. 

¿Cómo sabemos que el hongo ha hecho de las suyas?

Como hemos explicado, cuando este superhongo entra a formar parte de nuestra sangre y va causando esa infección es cuando se pueden notar los primeros síntomas como, por ejemplo, un cuadro febril, escalofríos o cansancio generalizado. Unas señales previas antes de que el hongo se traslade al sistema nervioso central, los riñones o el bazo, entre otros órganos.

Como se desconoce de dónde viene el Candida auris y a qué es debido su rápida propagación, sobre todo en centros sanitarios y hospitalarios, los expertos recomiendan seguir pautas de prevención, entre las que se encuentran extremar la limpieza de nuestras manos, así como mantener una higiene pormenorizada en esas instalaciones de salud donde es más sencillo que se extienda la amenaza. 

Además, no está de más si ese paciente descansa en una habitación individual en el hospital, si los aparatos y equipos con los que se le trata están perfectamente esterilizados y si su ropa no se lava a mano para evitar el contagio. Por su parte, los familiares que vayan a visitarle deber estar atentos a estas medidas de protección para evitar contagios.