¿Qué es la endoscopia y cuándo se recurre a esta prueba médica?

Cuando hablamos de endoscopia nos referimos a una prueba diagnóstica con la que el especialista introduce un instrumento de iluminación y cámara (en forma de tubo) dentro del cuerpo para explorar una parte del organismo. Procedimiento que se realiza en busca de pruebas que confirmen la existencia de una patología de la que se sospecha a priori. Gracias a esta imagen interior, se puede ver con todo detalle esas lesiones que pueden estar provocando esa afección, ya sean de tipo tumoral o no. 

Cuando se habla de endoscopia, a la mayoría de las personas les viene a la mente la que se realiza para observar el sistema digestivo; sin embargo, hay varios tipos de endoscopia según la parte del cuerpo a observar y estas son algunas de ellas: 

• Cistoscopia: endoscopia que se realiza a través de la uretra para llegar a esta y a la vejiga. 
• Laringoscopia: gracias a este procedimiento se observa con detalle la laringe, las cuerdas vocales y la parte posterior de la garganta. 
• Broncoscopia: en este caso, con un broncoscopio se llega hasta los pulmones desde la nariz o la boca. 
• Colonoscopia: otro de los procedimientos más conocidos y que se usa para observar el intestino grueso o el colon, así como para tomar una muestra (biopsia) o extirpar algún pólipo o tejido sospechoso. 
• Gastroscopia: la endoscopia digestiva superior explora el esófago, el estómago y el duodeno.
• Laparoscopia: con este procedimiento se visualiza la parte del abdomen y la pelvis. 

Antes y después de la realización de una endoscopia

¿Duele? Quizá sea una de las preguntas más repetidas al médico cuando este determina que hay que realizar una endoscopia. Antes de someterse a esta prueba, el médico te explicará con detalle cómo se realizará esta endoscopia, apenas dura 10 minutos en los casos más sencillos, y las recomendaciones que es importante seguir antes y después de este procedimiento: 

• Pueden aconsejarte que acudas en ayunas a la prueba y que cenes ligero la noche anterior. Si la endoscopia se realiza por la tarde, podrás desayunar un poco pero no comer nada, solo tomar agua, en las seis horas anteriores a la realización de esta prueba diagnóstica.
• El médico te preguntará si tomas algún tipo de medicación por si es conveniente suspenderla durante unos días.
• Para la prueba te administrarán un sedante o un anestésico local debido a la incomodidad y nerviosismo que genera la realización de una endoscopia. En el caso de que la prueba se realice desde la boca, se colocará una boquilla para proteger la dentadura del paciente. 
• Si te han sedado te recomendarán que, en las horas previas, no conduzcas; aunque sí puedes hacer una vida normal. Si no se ha empleado sedación, notarás unas ligeras molestias, pero en menos de una hora podrás comer con total normalidad si te han hecho la endoscopia por la garganta.