Teresa Rey
Medicina preventiva
Casi la mitad de los mayores de 65 años con insuficiencia cardiaca padece diabetes
A su vez los mayores de de 75 años diabéticos tienen el doble de riesgo de sufrir este trastorno
Poseer a la vez insuficiencia cardiaca (la incapacidad del corazón de bombear eficientemente sangre rica en oxígeno al cuerpo) y diabetes, es una circunstancia cada vez más común, sobre todo, en edades avanzadas. Así, los mayores de 75 años diabéticos presentan el doble de riesgo de sufrir este problema del corazón. Mientras que en España casi la mitad de los mayores de 65 años con insuficiencia cardiaca, principal causa de hospitalización de este grupo poblacional, padecen diabetes mellitus, según informan desde la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI @Sociedad_SEMI).
El aumento de la edad
Se considera que el vínculo entre estas dos patologías se debe principalmente a cuestiones fisiopatológicas y al aumento de la edad de los pacientes que las tienen. Los expertos aseguran que el hecho de tener diabetes es un riesgo para la insuficiencia cardiaca, pues favorece su desarrollo. Y al mismo tiempo esta influye y condiciona el tratamiento de la diabetes. Los datos indican que la prevalencia de la diabetes en personas con insuficiencia cardiaca se encuentra entre el 35 y el 45%.
Los médicos internistas aseguran que ambos trastornos son frecuentes en mayores de 75 años que además tiene otros problemas como obesidad, hipertensión arterial, enfermedad renal crónica, anemia, EPOC, hipertensión muscular y fibrilación auricular. Como consecuencia es habitual que en estos casos se originen descompensaciones que impliquen la hospitalización y provoquen una merma en la calidad de vida y vean reducidas sus capacidades funcionales.
Padecer estos dos trastornos implica una serie de complejidades en su abordaje. En el caso de la diabetes hay que prestar atención al tratamiento hipoglucemiante y ejercer un control, pues hay “fármacos contraindicados en insuficiencia cardiaca, de seguridad no aclarada, fármacos neutros y fármacos beneficiosos”, explica el doctor doctor Álvaro González, coordinador del Grupo de Trabajo de Insuficiencia Cardiaca y Fibrilación Auricular de la SEMI.
Miocardiopatía diabética y avances
Dentro del grupo de las enfermedades en las que confluyen ambas patologías, destaca la miocardiopatía diabética, que se origina por los daños que la hiperglucemia efectúa en el corazón a lo largo de los años. Además, los pacientes diabéticos tienen mayor probabilidad de desarrollar cardiopatía isquémica y otras enfermedades cardiovasculares, aseguran los especialistas.
En cuanto a los avances para su tratamiento, se están centrando en el conocimiento de los procesos fisiopatológicos que se dan en ambas enfermedades, lo que está favoreciendo la creación de nuevas dianas terapéuticas y nuevos medicamentos. Estos, hasta la fecha, están consiguiendo “reducir la mortalidad cardiovascular y beneficios netos no logrados hasta ahora con los fármacos disponibles”, apunta González.