Victoria Herrero
Medicina preventiva
Qué deben hacer los mayores con dolores lumbares a la hora de irse a la cama
Lo mejor es dormir de lado o boca arriba sobre un colchón con la firmeza adecuada
Irse a la cama con un dolor de espalda puede ser un buen remedio para aliviar esa zona dolorida y descansar algo. Sin embargo, por ejemplo, si se padecen molestias lumbares más serias, el hecho de acostarse puede suponer un verdadero suplicio ya que uno no se llega a relajar del todo. Por eso, las personas mayores que tengan estos síntomas pueden seguir estas recomendaciones cuando se vayan a dormir.
Consejos al irse a acostar
Al irte a dormir, y también cuando estés en el sofá o en una silla, nada de dejarte caer de golpe sobre la cama ya que, así, tus lumbares pueden sufrir aún más. Lo mejor para las personas mayores en estos casos es acomodarse tranquilamente al borde de la cama, hacer un giro con el cuerpo al tiempo que se elevan las piernas y uno se tumba con la cabeza perfectamente apoyada en la almohada.
Una rutina de movimientos que puedes hacer al incorporarte por las mañanas para, una vez sentado al borde de la cama, ir estirando poco a poco la espalda. En definitiva, que la espalda esté lo más recta posible en todo momento.
Si necesitas, pide ayuda a otra persona a la hora de irte a dormir para minimizar esas molestias de la parte baja de tu espalda.
Pero antes, puedes hacer este truco para estirar, con cuidado eso sí, tu espalda. Para ello, túmbate encima de la cama, o del suelo, y apoya tus glúteos en la pared. Como consecuencia de esta postura, tus piernas estarán subidas y descansarán sobre ese tabique. Mantén esta postura unos instantes, sin llegar a lastimarte, para ir relajando poco a poco esa zona dolorida.
Una vez en la cama, como recomiendan los especialistas del Hospital del Mar (@hospitaldelmar), lo mejor en caso de padecer dolor en las lumbares es descansar de costado o boca arriba y colocar un cojín debajo de las rodillas para que las piernas estén un poco flexionadas y estas personas mayores puedan tener un mejor descanso nocturno. Si no te resulta molesto, puedes poner otra pequeña almohada bajo las lumbares.
La solución puede estar en un colchón adecuado
Tan importante son estos consejos que estas personas pueden seguir como la superficie sobre la que duermen. De ahí que sea esencial contar con un colchón y una almohada adecuados en este caso.
Para la cabeza, lo mejor es descantarte por una almohada que no sea demasiado alta para que tus cervicales no sufran demasiado.
En cuanto al colchón, recuerda que debes cambiarlo antes de que cumpla 10 años, lo mejor es que este sea firme, pero sin llegar a ser demasiado duro. Olvídate de aquellos muy blandos o cuyos materiales no son de muy buena calidad. Estarás tirando el dinero y perjudicando la salud de tu espalda.
Cuando vayas a un establecimiento de artículos para el descanso, opta por un colchón que tenga una firmeza entre media o media alta y que sea de muelles o viscoelástico ya que estos materiales permiten al cuerpo adaptarse correctamente y reducir los puntos de presión. De esta manera se favorece que estas personas mayores mantengan la espalda recta y la zona lumbar recogida mientras duermen.