Teresa Rey
Medicina preventiva
¿Qué es lo que se esconde detrás de los escalofríos?
Teresa Rey
Foto: Bigstock
Lunes 30 de septiembre de 2019
ACTUALIZADO : Lunes 6 de julio de 2020 a las 13:50 H
5 minutos
Se confunden con la "piel de gallina" , pero esta se produce por otros motivos que los diferencian
Los escalofríos son una sensación que normalmente se relaciona con el miedo o el frío, pero realmente detrás de esta manifestación corporal hay algo más. Su aparición oculta en ocasiones algún trastorno sobre el que hay que estar pendiente. Respecto al miedo, decir que este vínculo no es del todo acertado. Realmente lo que nos ocurre en estas situaciones y que también acontece cuando recibimos una ráfaga de aire frío es que se nos pone la “piel de gallina”.
No es lo mismo que piel de gallina
Así, no hay que confundir ambos episodios, la llamada piel de gallina provoca que los vellos se pongan rectos formado una especie de capa protectora. Este fenómeno surge cuando hay aire frío cerca, o al recibir alguna noticia que nos impresiona o ante sensaciones que nos provocan miedo o un shock emocional. Según los expertos, es posible que cuando se tienen escalofríos la piel de gallina no aparezca.
Hecha esta primera aclaración, sí es cierto que los escalofríos surgen tras estar expuestos a temperaturas bajas y como consecuencia, el cuerpo reacciona produciendo temblores. Realmente lo que está haciendo el organismo es tratar de regular la temperatura corporal, y esta es su manera de tratar de dar solución al problema. También es un fenómeno habitual cuando hay alguna infección y se tiene fiebre. En este último caso, es habitual en niños pequeños.
En definitiva, los escalofríos son una reacción natural del organismo, una contracción muscular que tiene como finalidad regular la temperatura interior. Evidentemente cuando esto sucede de forma habitual y sin un motivo que los justifique aparentemente, hay que preguntarse el porqué y será necesario que el médico evalúe el origen de esta manifestación. Detrás de la misma pueden esconderse otros problemas de salud.
Escalofríos sin fiebre
Existen, por tanto, distintos motivos a los que se asocian los escalofríos, ya que este síntoma también se da en otras ocasiones y no necesariamente tiene que haber fiebre. Las causas de los escalofríos pueden ser muchas, por eso es importante determinar bien cuáles son. Estas son algunas de las patologías desencadenantes:
- En trastornos del tiroides o hipotiroidismo las personas presentan una mayor sensibilidad al frío. La hormona tiroidea es una de las encargadas de regular la temperatura corporal de ahí esta consecuencia.
- Si hay algún problema digestivo este síntoma puede aparecer junto a otros o incluso si tenemos alguna intoxicación alimentaria. Además, se puede producir junto a diversas manifestaciones si presentamos hipoglucemia, es decir, cuando se poseen unos niveles de azúcar por debajo de los parámetros normales.
- La carencia de nutrientes también los puede provocar. Una alimentación deficiente de algunos micronutrientes puedes desencadenar además de este síntoma, fatiga, pérdida de peso espontánea, mareos y agotamiento extremos.
- La ingesta de determinados medicamentos provoca en ocasiones este efecto secundario, por lo que tendremos que estar pendientes si surge tras tomar un nuevo fármaco.. A veces se produce una dosis inapropiada o una interacción con otro, lo que puede afectar al hígado y dar lugar a estas convulsiones.
- De igual modo, la anemia produce escalofríos en algunas personas, y también se acompaña por ejemplo de fatiga o mareos; o a su vez pueden ser algo común en la ansiedad o los ataques de pánico.
- Una infección urinaria puede dar lugar en determinadas momentos a escalofríos sin fiebre. Si presentamos este problema notaremos además dolor en la micción, un fuerte olor desprendido por la orina y dolor pélvico.
Tratamiento y prevención
En el caso de que los escalofríos sean recurrentes debemos acudir al médico para que trate de averiguar el motivo de su origen con diversas pruebas. Si se deben a una anemia nos indicará qué alimentos incluir en la dieta, así como si son consecuencia de algún trastorno nutricional. En estos casos nos mandará suplir las carencias por medio de modificaciones en los hábitos dietéticos. Mientras que si hay detrás una infección de las vías urinarias, lo primero será centrarse en esta y eliminarla.
En otros trastornos más complejos como el hipotiroidismo el tratamiento es más complicado, pero también existen alternativas terapéuticas para estos casos que nos indicará el facultativo.
Cuando se deben a problemas de ansiedad o fatiga, lo aconsejable es tomarse unos días de descanso. Es muy importante beber agua con abundancia si tenemos escalofríos, pues una correcta cantidad de este líquido favorece el buen funcionamiento intestinal, además de ayudar a mantener la temperatura del cuerpo en un estado óptimo.
Finalmente, cabe señalar que es aconsejable relajarse tomando un baño de agua caliente para aliviar esta incómoda sensación, y en general mantener hábitos de vida sanos.