Victoria Herrero
Medicina preventiva
El cáncer de mama también afecta a los hombres: la importancia de hacerse una autoexploración
En el caso de la población masculina, cuando se detecta, este tumor presenta un estadio más avanzado
El lazo rosa que nos recuerda la lucha que siguen millones de personas en todo el mundo para vencer al cáncer de mama está erróneamente asociado solo a las mujeres. Hablamos de una enfermedad por la que se forman células malignas (cancerosas) en los tejidos de la mama y que también se puede dar en los hombres.
También es cosa de hombres
En el caso de la población masculina, este tipo de tumor afecta, aunque en menor medida que la femenina. Por poner un dato, el 1% de los diagnósticos que se hacen corresponde a un hombre, en la mayoría por encima de los 60 años y con altos niveles de estrógeno. Son ellos los que sobre todo sufren un tipo de cáncer de mama que se caracteriza por una diseminación fuera de las células que recubren los conductos de la mama.
En este caso hablamos de la misma enfermedad con similares síntomas y pronóstico, salvo que en el caso de los varones a la hora de detectarlos el estadio del mismo es algo más avanzado.
El desconocimiento que tiene la sociedad en general de este tipo de tumor en los hombres hace que muchas veces no se sigan unas pautas preventivas para determinar antes de tiempo la presencia de ese tumor maligno en el caso de los varones.
Debido a que la mayoría de las campañas de prevención sobre cáncer de mama están dirigidas a las mujeres, los hombres reaccionan con extrañeza cuando se les diagnostica un tumor tan relacionado con la mujer, pero la realidad es que una pequeña proporción del cáncer de mama les toca a ellos. Por eso, los hombres deben aprender a autoexplorarse y, ante cualquier cambio en sus mamas, fundamentalmente bultos o alteraciones normalmente unilaterales e indoloras, acudir a su médico y consultar, explican la mayoría de los expertos a los que hacemos referencia.
Es por ello que la autoexploración es una de las acciones que se pueden hacer por parte de los hombres para comprobar que no hay rastro de esa afección de salud como recomiendan desde la Sociedad Española de Oncología Médica (@_SEOM) que apuntan, además, que en el caso de los hombres el factor genético es más predominante que en el caso de sus compañeras. Hasta un 40% de los tumores de mama encontrados en hombre tienen su origen en la mutación de algunos de sus genes; pero hay más causas detrás de la aparición del cáncer de mama masculino como puede ser la edad, el sobrepeso, padecer cirrosis hepática o estar expuesto a la radiación a niveles que no son considerados normales.
Eso sí, como apuntan estos expertos, esta palpación del cuerpo debe tomarse como una medida preventiva no como una ciencia cierta que haga que se detecte el cáncer de forma inmediata y se salven más vidas por ello. Pero no viene mal si, de vez en cuando, observamos nuestro cuerpo, insisten.
Las primeras señales de alarma
Cuando un hombre se detecta un pequeño bulto en su seno o su axila puede que no le dé importancia, como corroboran estos expertos, ya que lo suele achacar a un quiste o a un acúmulo de grasa. Sin embargo esos nódulos, así como otras señales evidentes como una piel que muestra signos de retracción, son algunas de las señales que avisan de este contratiempo de salud en forma de cáncer de mama.
Es aquí donde resulta bueno que un hombre se haga también una autoexploración para conocer su piel y su cuerpo y descartar este tipo de tumores. ¿Cómo se hace? Nosotros te lo explicamos de forma muy sencilla.
- Lo primero que debes hacer es colocarte sin camiseta delante de un espejo y observar ambos senos (y los pezones también) para comprobar que no hay ninguna anomalía y que son iguales. Con anomalías nos referimos a cambios de tamaño entre uno y otro, inflamación, protuberancias, zonas enrojecidas, cambios en la piel o si nota un hundimiento de la misma. Otras señales de alarma serían un dolor al tocar el pezón o que de este salga líquido.
- Esta misma exploración mamaria se hace con los brazos relajados hacia abajo a ambos lados del cuerpo, con las manos detrás de la cabeza apoyadas en la nuca y tumbado.
- En este último caso, nota si en tu seno hay bultos sospechosos y para ello se usan los 3 dedos medios de la mano derecha y sobre todo la parte de la yema que tiene una especial sensibilidad. La presión sobre el seno puede ir desde más superficial a más profunda para hacer una autoexploración más a conciencia.
- Haz esa misma observación palpable hacia la zona de las axilas y el centro del pecho, en el esternón.
Una vez se determina el diagnóstico temido, en la mayoría de los casos esos hombres se someten a una operación para practicarle una mastectomía con la que se le extirpa ese pecho. A continuación, se suelen aplicar sesiones de radioterapia para cerciorarse de que no queda ninguna célula cancerígena.