Las terapias con testosterona pueden tener efectos negativos para tu salud

Muchos hombres creen que tomar medicamentos con testosterona puede ayudarles a sentirse más jóvenes y vigorosos a medida que envejecen, pero son muy pocos los estudios que han analizado y comprobado esos efectos. En cambio, lo que sí se ha descubierto es que las terapias con testosterona conllevan varios riesgos para la salud. ¿Cuáles son los más llamativos?

Cuidado con el abuso de testosterona

• Contribuye a la apnea del sueño, un trastorno potencialmente grave en el que la respiración se detiene y se reanuda de forma repetida a lo largo de la noche.

• Puede incluso llegar a causar alguna reacción en la piel.

• En algún caso, despierta el crecimiento no canceroso de la próstata y el de cáncer de próstata, si existe.

• Lo mismo ocurre con las mamas, que pueden ver alterado su tamaño.

• Limita la producción de esperma o provoca encogimiento de los testículos.

• Aumenta el riesgo de formación de coágulos en venas profundas, que pueden desprenderse, desplazarse a través del torrente sanguíneo, alojarse en los pulmones y bloquear el flujo de sangre, provocando una embolia pulmonar.

• Repercute en el riesgo de padecer enfermedades cardíacas.

Por estos y otros muchos motivos, siempre debes consultar este tratamiento con tu médico para conocer sus ventajas e inconvenientes, pues se trata de una terapia muy invasiva.

¿En qué consiste?

Existen diversas formulaciones, como inyecciones, geles o incluso parches, que consiguen normalizar los niveles de testosterona del organismo.

Por otro lado, también mejora el apetito y la actividad sexual, y presenta beneficios a nivel de salud general. Sus propiedades afectan, sobre todo, a las masas grasa y muscular, los huesos, la capacidad intelectual, el perfil lipídico, el metabolismo de la glucosa y las enfermedades cardiovasculares.

¿Qué es la testosterona?

Es una hormona creada en los testículos que ayuda a los hombres a conservar la densidad ósea, la distribución de la grasa, la fuerza de los músculos, la masa muscular, la libido y la producción de glóbulos rojos y espermatozoides.

En la mayoría de los hombres, esta hormona alcanza su punto más alto durante la adolescencia y los primeros años de juventud, para luego descender gradualmente a medida que el hombre envejece. ¿Y qué pasa si los niveles bajan? Se pierde el apetito sexual y aumenta el cansancio. Además, también puede perjudicar a los músculos y su fuerza natural.