Mariola Báez
Salud
Medidas básicas para aliviar los problemas de insomnio habituales en personas mayores
El descanso nocturno es esencial para prevenir enfermedades y llevar una buena calidad de vida
Existen pocos datos sobre la incidencia del insomnio en las personas mayores, pero según recogen informes del portal Guía Salud, del Sistema Nacional de Salud, se calcula que un 32% de la población mayor de 65 años presenta algún tipo de perturbación relacionada con el sueño y que un 12% sufre síntomas del insomnio como el despertar precoz o la sensación de amanecer con cansancio.
Son muchos los factores que pueden hacer que cueste más conciliar el sueño a medida que se cumplen años. La presencia de problemas como la incontinencia urinaria y la consiguiente necesidad de levantarse varias veces en la noche para ir al baño, o la apnea del sueño son dos posibles causas insomnio crónico en la población adulta, tal como señala la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG)
¿Qué puedes hacer para dormir mejor?
El descanso es esencial para todos y en las personas mayores cobra especial importancia, porque según expertos en Geriatría, dormir menos de siete horas podría estar relacionado con un mayor riesgo de caídas y también con un incremento en el deterioro cognitivo.
Entre las medidas que ayudan a combatir el insomnio, favoreciendo la conciliación del sueño y el descanso profundo, tanto la SEGG como la Sociedad Española del Sueño (SES) destacan:
- Establecer un horario fijo que determine el momento de acostarse y levantarse, respetándolo lo máximo posible, también los fines de semana.
- Reducir las “cabezadas” diurnas. Echar una siesta después de comer es saludable siempre que no se exceda en el tiempo (máximo 30-40 minutos).
- Limitar la ingesta de líquidos a última hora, para no sentir la necesidad de ir al baño varias veces durante la noche.
- Hacer algo de ejercicio moderado pero no justo antes de dormir, mejor por las mañanas. Un relajante paseo disfrutando del sol puede ser una magnífica idea.
- Evitar cenas copiosas y bebidas excitantes como el café, el té o el alcohol.
- Asegurarse de dormir en un espacio confortable en cuanto a temperatura, humedad ambiental, nivel de ruidos... Además, también es importante descansar en una buena postura y en un colchón que se adapte a las características físicas personales.
- No dar vueltas y vueltas en la cama. Si pasados 15-30 minutos el sueño no llega, es preferible levantarse y hacer alguna actividad tranquila y relajante hasta que los párpados empiecen a pesar.