Rosa Roch
Rosa Roch es redactora especializada en temas de salud, alimentación y gastronomía.
… saber más sobre el autorLa odontofobia es el miedo o estado de angustia que sufre una persona cuando ha de ir al dentista y afecta al 15% de la población.
Si bien se podría pensar que el miedo a acudir al dentista es debido a una mala experiencia por haber sufrido dolor, la causa no siempre es esta. Generalmente, la odontofobia es un miedo injustificado a sentir dolor que no tiene que ver con malas experiencias en la consulta.
La sugestión hace que aprendamos a tener miedo aun sin haber sentido dolor.
Podríamos describir dos tipos de odontofobia, una producida por una experiencia directa, es decir, por haber tenido una experiencia traumática en la consulta del dentista y, otra, por experiencia indirecta, por haber visto o escuchar situaciones negativas sobre los tratamientos dentales. Esto hace que solo pensar en acudir a la consulta del dentista, pensar en el ruido de la turbina a la hora de realizar un tratamiento, la anestesia o el olor a desinfectante provoque un estado de inquietud y miedo que va acompañado por síntomas de diferente índole:
Este miedo de acudir al dentista hace que problemas bucodentales leves que podrían tener una solución rápida y fácil, en ocasiones, deriven en procesos de cierta gravedad y que, además, puedan prolongarse en el tiempo.
Para evitar la odontofobia es importante acudir al dentista cuando no se tiene dolor, pues con molestias ya se acude con cierto temor y en un estado de incomodidad. que acudir al dentista no Es importante que acudas al dentista de manera regular, no solo cuando se tiene dolor pues y necesario hacerse revisiones periódicas que, además de mantener nuestra salud bucodental y evitar que en un futuro tengamos que hacer tratamientos más costosos, nos permitirá tener confianza en la consulta y con el profesional que nos va a tratar.
Por mucho miedo que uno tenga, las visitas al dentista no se pueden evitar si queremos mantener una buna salud, no solo bucodental, sino también a nivel general del organismo. El edentulismo o la pérdida de algunos dientes conducen a una mala masticación que, a su vez, se traduce en malas digestiones, dejar de consumir alimentos con nutrientes necesarios para la salud, anemia, dificultades para articular las palabras, sobrecarga de otros dientes, deformidad en la mandíbula, además de mal aliento y pérdida de la calidad de vida.
Para empezar a perderle miedo al dentista puedes seguir estas recomendaciones
Si la odontofobia es grave, existen ciertas técnica para su tratamiento que van desde técnicas conductistas y de relajación, hasta la medicación, en función de la gravedad. Lo importante es acudir al dentista explicar cual es la situación y junto con el profesional buscar la mejor manera para afrontar el problema. Y recuerda, tu primera visita siempre ha de ser una toma de contacto con el lugar, para hacer una revisión y control, esa será la mejor manera de coger confianza con los profesionales que te atenderán en los diferentes tratamientos y con el lugar