Teresa Rey
Preguntas
Aminoácidos no esenciales: ¿cuáles son y qué hacen en el organismo?
Se sintetizan solos en nuestro interior y son responsables de numerosas funciones corporales
Los aminoácidos y las proteínas constituyen uno de los pilares para el funcionamiento del organismo. Los primeros se combinan para formar a las segundas y son vitales para reparar tejidos corporales, así como para desarrollar algunas funciones del cuerpo. Dentro de los aminoácidos hay varios tipos, están los esenciales, es decir, los que no se pueden sintetizar y que es necesario administrar por la alimentación; y los no esenciales, que se forman por sí solos dentro de nosotros a pesar de no obtenerlos por medio de los alimentos y que estos los posean igualmente. Es decir, se producen o sintetizan solos.
Este grupo de aminoácidos no esenciales es menos conocido, pero es extenso y conviene saber su composición pues gracias a cada uno de ellos se llevan a cabo muchas tareas corporales. Así, su exceso o carencia puede generar complicaciones de salud. De igual modo, están en muchos de los productos que consumimos. Los podemos encontrar en diferentes suplementos alimenticios, pero antes de recurrir a ellos es importante consultar con nuestro médico. Estos son algunos de ellos.
Aminoácidos no esenciales
Alanina
Esta sustancia forma parte del código genético e interviene en el metabolismo de la glucosa.
Aspartato o ácido aspártico
Es un importante estimulador del cerebro, que es donde se encuentra principalmente (en el hipotálamo), también en los testículos o la pituitaria (glándula en la base del cráneo).
Asparagina
Tiene que ver con procesos metabólicos del sistema nervioso central. En general, está relacionado con la función cerebral.
Glicina
El hígado se vale de este aminoácido para eliminar elementos tóxicos y generar sales biliares. La fuerza y masa muscular dependen en parte de este elemento. En concreto, regula los movimientos favoreciendo el buen tono muscular. Además, ayuda a la fluidez de la cognición y a la formación de tejido celular.
Glutamina
La buena marcha de nuestro cerebro se debe en parte al ácido glutámico, que es en lo que se transforma la glutamina cuando se deposita en él. Este ácido es a su vez otro aminoácido, un neurotransmisor encargado estimular la corteza cerebral. Tras la glucosa es el componente preferido para obtener energía por parte de este órgano.
Prolina
Se centra en restablecer y curar los tejidos conectivos dañados, y ayuda a crear colágeno, impidiendo además que este se pierda. Se halla en los ligamentos y los tendones.
Serina
El crecimiento del tejido muscular, la metabolización de grasas y ácidos grasos o el correcto mantenimiento del sistema inmunológico, son algunas de las misiones de la serina.
Tirosina
Es necesaria para producir melanina, y participa en funciones de la glándula tiroides, la suprarrenal y la pituitaria.