Arteterapia, en qué consiste y a quién se dirige

Gracias al arte muchas personas expresan sus emociones, su actitud ante la vida, sus sentimientos o sus estados de ánimo. Con el arte se pueden conseguir externalizar todas estas cuestiones, pues permite verbalizar a través de creaciones artísticas conflictos psicológicos. La arteterapia trabaja de este modo, es una forma de utilizar el arte y además lleva practicándose en el ámbito terapéutico desde hace más de 60 años.

En qué consiste

La finalidad de la arteterapia es que el paciente manifieste esas situaciones o conflictos psicológicos que le están impidiendo desarrollarse con normalidad en la sociedad. Para ello puede emplear diferentes materiales artísticos. Se puede trabajar con arcilla, pinturas, acuarelas, ceras…, en definitiva con aquello que uno se sienta más identificado y a gusto. Se busca que la actividad sea placentera.

Para empezar con las sesiones no es necesario tener conocimientos previos de arte. El objetivo no es llegar a ser grandes artistas o elaborar obras para exhibir en un museo. La intencionalidad es que el arte se convierta en un medio para comunicar una situación interna, a la par que se hace una actividad que nos reconforta.

En este proceso el terapeuta acompaña a la persona respetando su ritmo creativo, ofrece alternativas y se convierte en su apoyo siempre que lo requiera. Pero es el individuo el que decide qué desea hacer, de qué manera y cuándo lo quiere compartir.

A quién está dirigida

Esta terapia está dirigida a todo aquel que no sea capaz de utilizar las palabras para comunicarse eficazmente y tiene problemas para transmitir de este modo sus emociones, bien por una enfermad concreta, bien por circunstancias personales, tal y como cuentan en la Asociación Profesional Española de Arteterapeutas.

Las clases son individuales o colectivas, dependiendo de las preferencias. Es importante que la persona que acceda sea consciente de que va a someterse a una terapia para solucionar sus conflictos internos. La aplicación de la arteterapia varía según la problemática individual y es por ello que el terapeuta formado tendrá que valorar la forma de actuar en cada situación, al margen de que se traten talleres dirigidos a una sola personas o varias.

La arteterapia se emplea en distintas afecciones relacionadas con la salud mental, problemas conductuales, personas con discapacidad, tras experiencias traumáticas, y en general, en trastornos anímicos o emocionales.