¿Qué es la ateroesclerosis? Te descubrimos esta patología de las arterias
Un endurecimiento que se produce por ciertas sustancias que impiden o dificultan el flujo sanguíneo
La acumulación de grasa, colesterol y otras sustancias que dificultan o impiden el flujo sanguíneo es la principal causa de que el 70% de la población sana sufra ateroesclerosis o endurecimiento de las arterias, primera causa de muerte en el mundo. Datos que detalla el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares Carlos III (@CNIC_CARDIO) acerca de una patología de las arterias que comparte con el alzhéimer factores de riesgo como la obesidad, la hipertensión o el sedentarismo, entre otros.
La importancia que tienen nuestras arterias
Gracias a estos vasos sanguíneos, desde le corazón se conduce sangre rica en oxígeno a todas las partes del cuerpo. Sin embargo, cuando esas arterias se van taponando de una placa formada por grasa o colesterol, da lugar a lo que se conoce como ateroesclerosis. Las arterias se vuelven entonces más estrechas y rígidas e impiden un flujo sanguíneo normal.
Esta patología, como hemos explicado antes en palabras de estos expertos, no tiene una única causa concreta pero sí que es cierto que aparece con la suma de ciertos factores de riesgo como el hecho de fumar, tener los niveles de colesterol altos, hipertensión arterial, el elevado consumo de grasas saturadas en la alimentación diaria, diabetes o la falta de ejercicio de forma regular.
¿Cuáles son los síntomas y su tratamiento?
La ateroesclerosis no es algo que se forme de la noche a la mañana, sino que es un proceso gradual. Solo cuando la situación es más comprometida es cuando la persona puede sentir un dolor fuerte en la zona afectada (corazón, extremidades inferiores, arterias cerebrales, tórax...), así como dificultades para respirar de forma normal. Además, según la región del cuerpo donde se produzca esa patología de las arterias se puede notar una especie de entumecimiento muscular en brazos o piernas, pérdida de visión temporal de un ojo o insuficiencia renal.
Confirmado el diagnóstico por parte de un especialista, el tratamiento debe ser iniciado cuanto antes para que la situación no se agrave y no derive en algo más grave como puede ser un ataque al corazón o un accidente cerebrovascular. Así, se recomendará, principalmente:
- Nada de tabaco, reconducir los malos hábitos alimenticios y hacer algo de ejercicio físico para tener un peso más saludable.
- Seguir un tratamiento farmacológico con anticoagulantes, así como otros medicamentos para reducir el colesterol y controlar la presión arterial.
