Cómo afectan las cardiopatías congénitas a la esperanza de vida

Las cardiopatías congénitas surgen durante el periodo embrionario y comprenden un conjunto de enfermedades que provocan alteraciones en las estructuras y el funcionamiento del corazón. Su causa en la mayoría de los casos es desconocida y a su vez es el tipo de anomalía congénita más común. Se considera que se producen por diversos motivos, y no suelen estar ligadas a una mutación genética específica.

Tipos de cardiopatías

En la Fundación Española del Corazón (FEN @cuidarcorazon) explican que la posibilidad de herencia de padres a hijos es baja, oscilando entre el 3% y el 5%, y aparecen aproximadamente en un 1% de los recién nacidos.

Hay una variedad muy amplia, pero básicamente se dividen en dos tipos. Por un lado están las cianóticas, que son las que impiden una correcta oxigenación de la sangre dando lugar a cianosis o amoratamiento de los labios y de las uñas. Entre estas se encuentran por ejemplo la anomalía de Ebstein, transposición de los grandes vasos, tetralogía de Fallot o la atresia tricúspide.

El otro grupo está comprendido por las no cianóticas. Aquí se encuentran las obstructivas, que provocan problemas para que la sangre salga de las cavidades cardiacas. Y luego se hallan las cardiopatías en las que las estructuras del corazón que separan la circulación sistémica de la pulmonar presentan alguna alteración, de modo que se produce el paso de sangre de la primera a la segunda.

Controles y esperanza de vida

Al existir tantos tipos diferentes no se puede hablar de un tratamiento generalizado. De hecho, algunas de ellas no presentan síntomas. Otras sí lo hacen desde un primer momento y hasta necesitan de una intervención quirúrgica inmediata, en las primeras semanas de vida.

El caso es que las personas que nacen con alguna cardiopatía congénita van a tener que estar sometidos a una serie de controles para llegar a la edad adulto con los cuidados necesarios, que les permitan desarrollar si vida con la mejor calidad posible. De hecho, se hace necesario realizar una planificación que abarque todas las fases de la vida que comprende una serie de hábitos y comportamientos hasta el envejecimiento.

Hoy en día, gracias a los avances conseguidos en la medicina y en concreto en la cardiología, se ha logrado que las personas con determinadas cardiopatías congénitas tengan una esperanza media de vida prácticamente igual que la de la población general.