Complicaciones en los cuidados o aislamiento, problemas de las personas ostomizadas

La ostomía es una intervención quirúrgica que consiste en abocar o exteriorizar el intestino en la pared abdominal con fines excretores. Esta cirugía se tiene que aplicar en pacientes que han sufrido algún tipo de cáncer (como el cáncer de colon o de recto), enfermedades inflamatorias o que han tenido accidentes o traumatismos. Son personas que no pueden hacer las deposiciones por el ano y se les tiene que intervenir para conectarles a un bolsa que recoge su orina y heces.

En España, más de 70.000 personas viven ostomizadas, que además después de la intervención sufren importantes cambios físicos que implican modificaciones en hábitos higiénicos y alimentarios. Aspectos cotidianos como el ocio, la sexualidad, la vida social y laboral, se ven alterados.

Cuidado de los estomas

En estas intervenciones se crean estomas, es decir aberturas quirúrgicas que se conectan con las bolsas donde se van a depositar las desechos corporales. Es importante que el paciente reciba asesoramiento, pues los dispositivos empleados pueden ser diferentes en cada persona. Estos hay que cambiarlos cada cierto tiempo, normalmente cuando se llenan hasta un tercio o la mitad, y es necesario mantener muy limpia la piel que los rodea, además de seca y desinfectada.

La calidad de vida de estos pacientes depende de una manera muy importante de su acceso a cuidados médicos y enfermeros estomaterapeutas, profesionales de referencia en el cuidado de los estomas. Esto es así porque las infecciones, fugas y problemas cutáneos son frecuentes, sobre todo si no reciben la ayuda y asesoramiento adecuados. Al mismo tiempo, sufren con frecuencia problemas de aislamiento social y ansiedad.

A pesar de esta realidad, hasta el 35% de los pacientes ostomizados de hospitales públicos en España no tienen acceso a estas consultas de enfermería, según se recoge en el Libro Blanco de la Ostomía, elaborado entre 500 profesionales y pacientes en colaboración con Coloplast. Al mismo tiempo, desde la Asociación de Ostomizados de Madrid (AOMA @AOMA1) aseguran que muchas de las personas ostomizadas se encuentran con dificultades en las consultas de urgencias o de atención primaria, pues hay desconocimiento especialmente si se producen complicaciones.

Problemas psicológicos derivados de los cambios externos

Estas personas se ven sometidas a cambios en los hábitos intestinales y urológicos y en la imagen corporal, explica Ana Pérez, directora de Grado de Enfermería de la Universidad Francisco de Vitoria de Madrid (UFV @ufvmadrid). Además, tienen que aceptar el diagnóstico, el tratamiento y los efectos secundarios, pero no solo ellos también quienes les rodean.

“El diagnóstico que recibe el paciente, y consecuentemente la familia, pone un interrogante sobre la continuidad de las rutinas y hábitos diarios durante algún tiempo. Todo esto puede conllevar desde una mayor dependencia a la hora de tomar decisiones cotidianas, hasta un distanciamiento en las relaciones sociales, si no se aborda adecuadamente”, asegura la experta.

Los efectos psicológicos y espirituales que produce este trastorno en los afectados y su entorno no deben de dejarse de lado, sobre todo, porque pueden influir en su proceso de recuperación. Por eso tanto los pacientes como algunos sectores profesiones, aseguran que las personas ostomizadas necesitan una atención intregral que atienda a todas las dimensiones de las mismas, tanto en lo biológico como los espiritual.