¿Qué provoca el desgaste de encías y qué consecuencias tiene para la salud dental?

La recesión de las encías es el proceso en el cual el margen del tejido de las encías que rodea los dientes disminuye, exponiendo más del diente o la raíz del diente. Esto puede hacer que se formen "bolsas" o espacios entre los dientes y la línea de las encías, lo que facilita la acumulación de bacterias que causan enfermedades. Si no se trata, el tejido de soporte y las estructuras óseas de los dientes pueden sufrir daños graves y, en última instancia, pueden provocar la pérdida de los dientes.

Según la Doctora de Dentix (@dentix_es) Luz Castro Márquez, la recesión de las encías es un problema dental común. La mayoría de las personas no saben que tienen recesión de las encías porque ocurre gradualmente. El primer signo de recesión de las encías suele ser la sensibilidad dental, gingivitis o inflamación y llegar a notar que un diente se ve más largo de lo normal. Si crees que tus encías sufren inflamación o recesión, pide cita con tu dentista. Existen tratamientos para mejorarlo y prevenir mayores daños.

¿Por qué las encías retroceden?

Existen varios factores que pueden hacer que sus encías retrocedan, que incluyen:

• Enfermedades periodontales. Son infecciones bacterianas en los tejidos de soporte del diente, como el ligamento periodontal y el hueso. Están relacionadas con hábitos como el tabaco y mala higiene.
• Genética. Algunas personas pueden ser más susceptibles a la enfermedad de las encías. 
• Cepillado de dientes agresivo. Si te cepillas los dientes con demasiada fuerza o de la manera incorrecta, puede hacer que el esmalte de tus dientes se desgaste y tus encías retrocedan.
• Insuficiente cuidado dental. El cepillado, el uso de hilo dental y el enjuague inadecuados con enjuague bucal antibacteriano facilitan que la placa se convierta en cálculo (sarro), lo que puede conducir a la recesión de las encías.
• Cambios hormonales. Las fluctuaciones en los niveles de hormonas femeninas durante la vida de una mujer, como en la pubertad, el embarazo y la menopausia, pueden hacer que las encías sean más sensibles y más vulnerables a la inflamación y recesión de las encías.
• Tabaco. el hábito de fumar se ha demostrado que tiene relación con la aparición o empeoramiento de enfermedades periodontales.
• Maloclusiones dentales. Si los dientes están apiñados, es más dificil realizar una adecuada higiene.

¿Cómo se trata la recesión de las encías?

La recesión leve de las encías puede ser tratada por tu dentista mediante una limpieza profunda del área afectada. Durante la limpieza, la placa y el sarro que se ha acumulado en los dientes y las superficies de la raíz debajo de la línea de las encías se eliminan cuidadosamente y el área de la raíz expuesta se alisa para que sea más difícil para las bacterias volver a adherirse. También se pueden administrar antibióticos para eliminar las bacterias dañinas restantes.

Si tu recesión de encías no puede tratarse con una limpieza profunda debido a la pérdida excesiva de hueso y bolsas demasiado profundas, es posible que se requiera cirugía de encías para reparar el daño causado.

¿Qué tipo de cirugía se usa?

Los siguientes procedimientos quirúrgicos se usan para tratar la recesión de las encías:

• Descamación del colgajo abierto y raspado y alisado radicular: durante este procedimiento, el dentista o periodoncista pliega el tejido de las encías afectado, elimina las bacterias dañinas y luego asegura firmemente el tejido de las encías en su lugar sobre la raíz del diente, eliminando así las bolsas o reduciendo su tamaño.
• Regeneración: si el hueso que sostiene los dientes se ha destruido como resultado de la recesión de las encías, se puede recomendar un procedimiento para regenerar la pérdida de hueso y tejido. En este caso, se le realiza el mismo procedimiento anterior y luego se aplica un material regenerativo, como una membrana, tejido de injerto o proteína estimuladora de tejido, para alentar a su cuerpo a regenerar naturalmente el hueso y el tejido en esa área. 
• Injerto de tejido blando: existen varios tipos de procedimientos de injerto de tejido de las encías, pero el más utilizado se denomina injerto de tejido conectivo. En este procedimiento, se extrae el tejido del propio paladar del paciente. Normalmente se utiliza para recesiones leves o moderadas, solo de encía para mejorar recesiones de zonas estéticas como son los incisivos inferiores.

Tu dentista determinará que tipo de procedimiento se puede realizar en tu caso.

¿Cómo puedo prevenir?

La mejor manera de prevenir la recesión de las encías es cuidar bien la boca. Cepíllate los dientes y usa hilo dental todos los días y consulta a tu dentista al menos dos veces al año. Si tienes recesión, es posible que tu dentista quiera verte con más frecuencia e indicarte tratamientos para que no empeore.

 Otras formas de prevenirla incluyen:

• Dejar de fumar.
• Una dieta saludable.
• Controlando los cambios que pueden ocurrir en tu boca.
• Cuidando bien tus dientes, una buena higiene bucal es clave.