Preguntas

¿Qué objetos pueden provocar la dermatitis de contacto?

Ruth Macarrón

Foto: Bigstock

Lunes 10 de junio de 2019

3 minutos

Esta enfermedad provoca lesiones cutáneas al contacto con objetos de uso cotidiano

Objetos que pueden provocar dermatitis de contacto
Ruth Macarrón

Foto: Bigstock

Lunes 10 de junio de 2019

3 minutos

Guantes de látex, tintes para el pelo o cosméticos, pero también monedas, esmaltes de uñas y hasta cremalleras. La dermatitis de contacto alérgica produce una irritación en la piel al contacto con alguna sustancia alérgena para nuestro organismo. La lista es infinita, pero te contamos cuáles son los objetos que pueden provocar la dermatitis de contacto más frecuentes.

Dermatitis de contacto alérgica o irritativa

Dentro de la dermatitis de contacto tenemos que distinguir dos tipos. La dermatitis de contacto irritativa es la más común, y es en la que la inflamación en la piel se produce debido a las propias características del objeto que la desencadena, sin que exista una alergia de por medio. Este tipo de dermatitis es la que nos produce, habitualmente, un champú o tinte para el pelo, algunos químicos empleados en el jardín para evitar las plagas o el cemento.

En la dermatitis de contacto alérgica entra en juego el sistema inmune. El objeto en cuestión nos produce una alergia (que no experimentaremos en el primer contacto, si no en sucesivos), y que será de por vida. Según la Fundación Piel Sana de la Asociación Española de Dermatología y Venereología se puede presentar en tres formas según sus síntomas, siendo los más habituales el eritema y el prurito en las lesiones. Los pacientes que sufren dermatitis atópica son más propensos a desarrollar este tipo de dermatitis también.

Qué objetos producen dermatitis de contacto

Entre los objetos que producen la dermatitis de contacto alérgica, los que contienen metales como el níquel o el cromo están los primeros de la lista. Lo más habitual es encontrarlos en bisutería (collares o pendientes) y relojes, pero también en botones, broches o cremalleras de la ropa, que hacen la vida imposible a los afectados. También pueden producirla los broches del sostén y algunas monedas que están recubiertas de níquel.

Entre los químicos, el formaldeido, parafenilendiamina o el sulfato de neomicina son los potenciales alérgenos más frecuentes. Se encuentran en todo tipo de preparaciones cosméticas, desde tintes del pelo o pintauñas a antibióticos tópicos de venta libre. Además, muchas de las fragancias empleadas en perfumes, cremas o geles también pueden producir dermatitis de contacto alérgica, por lo que muchas veces supone un reto conocer el origen de la misma.

Sobre el autor:

Ruth Macarrón

… saber más sobre el autor