Teresa Rey
Preguntas
¿Cuáles son las principales enfermedades crónicas en mujeres mayores?
Existen algunas diferencias respecto al sexo masculino respecto a trastornos del corazón y mentales
El envejecimiento poblacional así como la mejora asistencial está provocando un cambio en el panorama de la salud. Ahora la esperanza de vida es mayor, y esto unido a lo anterior ha provocado que ciertas patologías se conviertan en prevalentes. Este es el caso de la diabetes, la obesidad mórbida, la insuficiencia cardíaca, el VIH y el cáncer, entre otras, que a día de hoy se han transformado en patologías crónicas. Según datos de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI @Sociedad_SEMI), en España, el 80% de las consultas de Atención Primaria, el 60% de los ingresos hospitalarios y el 85% de los pacientes ingresados en Medicina Interna se deben a enfermedades crónicas.
Enfermedades cardiovasculares
Con respecto a estas patologías las diferencias por sexo se han de tener en cuenta. Se sabe que en el caso de las mujeres la enfermedad cardiovascular se suele presentar más en forma de accidente cerebrovascular, es decir, de ictus, y en hombres es más habitual que lo haga como infarto de miocardio. Además, las mujeres suelen presentar una mayor prevalencia de factores de riesgo cardiovascular como diabetes, obesidad, hipertensión o fibrilación auricular.
Lo que es evidente es que el sexo femenino en general suele ser más longevo, y las principales enfermedades no transmisibles por las que suelen fallecer, son por un lado las cardiovasculares, y por otro el cáncer, según indican desde la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Las enfermedades cardiovasculares suponen el 46% de las muertes de mujeres de edad avanzada en todo el mundo, mientras que al cáncer se le atribuye un 14 por ciento, siendo los más letales el cáncer de pulmón, el de mama, el de colon y el de estómago. Las afecciones respiratorias crónicas, en particular la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), son responsables de un 9% de las defunciones entre las féminas.
Las mujeres mayores presentan determinados tipos de enfermedades crónicas a consecuencia de diversos elementos no solo biológicos, también a factores de riesgos a los que se han visto expuestas durante su adolescencia o en etapas anteriores a la edad adulta, siendo algunos de ellos el tabaquismo, el sedentarismo y la mala alimentación.
Otros trastornos
Otros problemas de salud crónicos que afectan a este grupo de población son las deficiencias auditivas, la artritis, la depresión, la ansiedad crónica y la demencia. La artrosis es una enfermedad crónica que afecta más a las mujeres. Este es un trastorno que se localiza en los huesos y los cartílagos, y genera problemas de movilidad en las articulaciones.
La osteoporosis puede afectar por igual a hombres y mujeres, pero el riesgo de sufrirla es mayor en ellas. Sobre todo tras la menopausia. Esta patología consiste en un debilitamiento de los huesos, que hace que se vuelvan más frágiles incrementando el riesgo de padecer una fractura.
No obviar las diferencias
Teniendo en cuenta las diferencias que presentan hombres y mujeres los expertos destacan la importancia de tener en cuenta el sexo del paciente en la toma de decisiones clínicas, diagnósticas y terapéuticas en las enfermedades crónicas. Esto es así porque muchos medicamentos se metabolizan de forma diferente en ambos sexos, debido a las variaciones en el tamaño corporal o los niveles de hormonas sexuales, y pueden presentar distintos efectos adversos en uno y otro caso, explican los expertos.
“Cuando hablamos de mujer y cronicidad se abre la puerta a un gran debate global y otros paralelos en los que nos debemos preguntar sobre cómo se aborda la mujer como paciente de enfermedades crónicas o la mujer cuidadora principal de pacientes crónicos”, indica la doctora Ana Arroyo, tesorera de la Junta de la Sociedad Española de Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (Semfyc @semfyc).
Discapacidad no reconocida
Por otra parte destacar que según datos recientes publicados por la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP @pacientesPOP) en colaboración con la Fundación ONCE (@Fundacion_ONCE), el Observatorio Estatal de la Discapacidad (@OED_Olivenza) y la Universidad Complutense de Madrid (UCM @unicomplutense), solo el 34% de las mujeres con enfermedad crónica tiene reconocida la discapacidad en España. El estudio ha reflejado que esta circunstancia se debe a que en muchas ocasiones el certificado de discapacidad no se solicita debido sobre todo a una falta de información al respecto.
Un 15% de ellas, y el 12% de ellos, indican que no lo piden porque los baremos actuales para obtener dicho certificado no contemplan las peculiaridades de su enfermedad. El 33% de las mujeres asegura que no dispone de suficiente información y el 23% consideraba que no tenía derecho a prestación, entre otros motivos.
Por otro lado, este informe recoge también datos relativos a los roles de atención y cuidado a las personas crónicas. Estos apuntan que el 19 por ciento de las mujeres y el 15,5 por ciento de los hombres cuidan a otra persona con discapacidad, enfermedad y/o dependencia. Ellas, además, dedican diez horas a la semana más de media que los hombres a esta tarea.