Teresa Rey
Preguntas
¿Afecta por igual la testosterona alta a hombres y mujeres mayores?
En las mujeres esta condición puede incrementar el riesgo de padecer enfermedades metabólicas
Tener la testosterona alta puede ser indicativo de diversos aspectos positivos o negativos para la salud, dependiendo de la persona afectada y del sexo, aunque predominan los efectos adversos. Así lo ha determinado el estudio más grande que se ha realizado hasta el momento sobre la regulación genética de los niveles de hormonas sexuales, que se ha publicado en la revista Nature Medicine y que ha dirigido un equipo de investigadores de la Unidad de Epidemiología del Consejo de Investigación Médica (MRC) de la Universidad de Cambridge y la Universidad de Exeter.
Más diabetes tipo 2 en mujeres
Este informe ha concluido que si genéticamente se dispone de unos niveles más altos de testosterona aumenta a su vez el riesgo de padecer enfermedades metabólicas como la diabetes tipo 2 en las mujeres, pero en el caso de ellos se reduce. Al mismo tiempo, en ellas incrementan las posibilidades de sufrir cáncer de mama y de endometrio, mientras que en los hombres se ven incrementados los riesgos de tener cáncer de próstata.
Los factores genéticos que se ha encontrado en ambos sexos difieren bastante, a pesar de que hay un fuerte componente de este tipo en los niveles circulantes de testosterona en los dos. Así lo ha indicado el equipo, que para realizar la investigación usó estudios de asociación de genoma amplio (GWAS) en 425.097 participantes del Biobanco del Reino Unido, con el objeto de identificar 2.571 variaciones genéticas asociadas con diferencias en los niveles de la testosterona y su proteína de unión a la globulina de unión a la hormona sexual.
Para verificar los resultados, se hicieron comparativas con otros informes genéticos, como los de EPIC-Norfolk y Twins UK, y hallaron que había una gran coincidencia con los resultados en UK Biobank.
Después se llevaron a cabo diversas comprobaciones para verificar si las asociaciones conocidas entre los niveles de esta hormona sexual y la enfermedad son casuales o correlativas. Para ello usaron un enfoque llamado aleatorización mendeliana. Así es cómo vieron que en el caso de las mujeres que genéticamente presentan más niveles de testosterona aumentan los riesgos de diabetes tipo 2 en un 37%, y el síndrome de ovario poliquístico, en un 51%. Pero en los hombres, esta circunstancia reduce la posibilidad de padecer diabetes tipo 2 en un 14%.
Comprender mejor las hormonas sexuales
La ventaja que ofrece este descubrimiento, por ejemplo en el caso del síndrome del ovario poliquístico, es que de este modo se puede empezar a comprender el papel que realmente juega la testosterona en el origen del mismo, en lugar de considerarse solo como una consecuencia.
En los hombres, a veces para tratar el cáncer de próstata se emplean terapias reductoras de estas hormonas. Sin embargo, hasta el momento se desconocía si unos niveles más bajos de las mismas protegían frente al desarrollo de este tipo de tumor. “Nuestros hallazgos muestran cómo las técnicas genéticas como la aleatorización mendeliana son útiles para comprender los riesgos y beneficios de las terapias hormonales", ha matizado el autor principal del artículo, el doctor John Perry, de la Unidad de Epidemiología del MRC en la Universidad de Cambridge (Reino Unido).
Al final, lo más interesante es que con los datos obtenidos se sabe algo más del papel que juega la testosterona en la enfermedad. De hecho, teniendo en cuenta los resultados los científicos apuntan que es importante separar a ambos sexos en los estudios, y además abogan por ser más precavidos a la hora de suplementar con estas hormonas, pues es necesario ver con precisión si hay más vínculos con otras enfermedades como pueden ser las cardiovasculares.
La salud del corazón
Precisamente en este último sentido también se han efectuado diversos informes. Uno de ellos, realizado por investigadores de la Universidad de California, en San Francisco (Estados Unidos), demostró que los hombres mayores con mayores niveles de testosterona mostraban más propensión a tener ataques al corazón u otras enfermedades cardiovasculares en el futuro. Estas conclusiones contradijeron lo que habían aseverado otros estudios más pequeños realizados hasta el momento, en los que no se habían encontrado este tipo de asociaciones.
Otro estudio realizado por científicos del Boston University School of Medicine y del Boston Medical Center, publicado en The New England Journal of Medicine, también mostrón que tener niveles elevados de esta hormona sexual, “podría aumentar notablemente el riesgo de padecer eventos cardiovasculares adversos”.
Estas son algunas de las conclusiones que ha determinado la ciencia sobre este asunto, aunque los expertos consideran que es necesaria más investigación al respecto. Lo que sí sabe hasta el momento es que cuando esta sustancia es alta en un hombre, puede indicar que hay un tumor en los testículos o las glándulas suprarrenales. Si, por el contrario es baja, significa que puede haber una enfermedad genética o crónica, o un problema con la glándula pituitaria.
En las mujeres las cantidades elevadas de testosterona avisan de un posible síndrome de ovario poliquístico, cáncer de ovario o de las glándulas suprarrenales. Mientras que cuando los niveles son extremadamente bajos, tal vez se padezca enfermedad de Addison, un trastorno de la glándula pituitaria.