¿Cuánto tiempo tardan en presentarse los síntomas de coronavirus?

Estantes de supermercados vacíos de productos básicos, centros educativos y espacios públicos cerrados en algunas zonas, recomendaciones para que la gente tome (en serio) las medidas preventivas para evitar contagios; son solo algunas de las noticias que se conocen en nuestro país tras las drásticas iniciativas puestas en marcha para contener el avance del coronavirus. Un contagio que en España ya afecta a más de 2.000 personas y ha provocado el fallecimiento de más de una treintena de pacientes en su mayoría con más de 65 años y con patologías previas de importancia. 

Las primeras señales de alarma

Los coronavirus pertenecen a una familia de virus que pueden desencadenar enfermedades muy diferentes y con diversas escalas de gravedad: desde un resfriado hasta una patología respiratoria más grave como puede ser una neumonía. Es por eso que gran parte de los coronavirus no son peligrosos y se tratan de forma eficaz. No obstante, a lo que ahora se enfrentan los profesionales sanitarios en España es al tipo COVID-19 cuyo brote empezó a finales del pasado año en China donde aparecieron los primeros casos y que, en cuestión de unos meses, se ha extendido a un centenar de países. 

Un contagio que se produce de una manera muy rápida y que muestra su cara en forma de los primeros síntomas como es el caso de tos, fiebre y dificultad para respirar. Señales que pueden hacer pensar que quizá se trate de algo más que una simple gripe común y a la que se añaden otras evidencias (no tan conocidas) y en las que también conviene poner el foco de atención. Es el caso de la congestión nasal, la diarrea o los vómitos. Pero no hay que alarmarse, recuerdan las autoridades sanitarias, ya que estos síntomas también pueden obedecer a otro tipo de enfermedades que nada tengan que ver. Por lo tanto, es importante descartar patologías ante el primero indicio. 

Y es que es especialmente importante detectar las primeras señales sobre todo en aquellos pacientes donde pueden volverse más graves como es el caso de personas mayores con inmunodepresión o con enfermedades de tipo crónico como diabetes o patologías pulmonares previas. Unos indicios que pueden aparecer al cabo de un par de días desde que se produjo el contagio o incluso si han pasado un par de semanas desde la exposición a una persona que pudiera ya tener el virus. Para ser más concretos y según un estudio llevado a cabo recientemente por el Departamento de Epidemiología de la Escuela de Salud Pública Bloombergd de la Universidad Johns Hopkins (@JohnsHopkins), la estimación media para el desarrollo de los síntomas es de 5 días. 

Por tanto, con estas estimaciones, los expertos sanitarios apuntan a 14 días como el tiempo recomendado en caso de cuarentena. Una fase que incluso se puede alargar en los casos más extremos que estén justificados por la posible gravedad del estado de salud del paciente contagiado. 

Pero antes de eso y si una persona cree tener los síntomas de coronavirus, las autoridades sanitarias recomiendan llamar antes a los teléfonos de información habilitados en cada Comunidad Autónoma. De esta manera, recuerdan, uno debe permanecer en casa y evitar colapsar los servicios sanitarios, así como no poner en riesgo a otras personas sanas en el caso de que uno ya se haya contagiado.

¿Cómo se propaga?

La rapidez con la que este virus se ha propagado de forma tan virulenta tiene que ver con el fácil contagio que se realiza de persona a persona, especialmente a través de las gotitas respiratorias que se desprenden cuando alguien que está infectado tose o estornuda. Sustancias que pueden llegar a la boca o la nariz de otras personas que estén cerca y que incluso entran en los pulmones desencadenando los primeros problemas respiratorios. Eso sí, en este caso es bueno recordar que es poco probable que el contagio se produzca por el aire si ambas personas están a más de un metro o dos de distancia. 

No obstante, el contagio también se da por medio de objetos o superficies que se tocan de forma inconsciente y cotidiana. Es por eso que una de las medidas preventivas eficaces habla de lavarse bien las manos de forma frecuente, además de evitar tocarse la boca, la nariz, los ojos o la cara ya que se puede transmitir de manera muy rápida por esta vía. 

La prevención es clave, sobre todo en los mayores

Medidas todas ellas que deben ser responsablemente seguidas, sin caer en el pánico social, por todos los ciudadanos como alertan desde las autoridades sanitarias. Por eso, antes de que se desencadene una mayor fase de alarma (acrecentada por los bulos que circulan por Internet) la mejor herramienta para evitar contagios es mantener algunas recomendaciones: 

• El uso de mascarillas es solo imprescindible para aquellas personas contagiadas o que estén en contacto directo con pacientes que portan el virus como recuerda el director del Centro de Coordinación y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón (@sanidadgob). 
• Además, este experto recomienda evitar el contacto con personas enfermas y cubrirse la nariz y la boca (con un pañuelo desechable o el antebrazo) cuando uno va toser o estornudar.
• Es importante, además, lavarse las manos de forma frecuente y a conciencia, además de intentar no tocarse los ojos, la nariz y la boca. Lo mejor para cumplir con esta pauta de higiene es tirar de agua y jabón y no hacer un abuso desmedido de los geles desinfectantes. Solo se puede recurrir a este tipo de productos en ocasiones puntuales y si no se cuenta con otro método para tener limpias las manos.