Verónica Mollejo
Preguntas
¿Qué síntomas puede experimentar tu cuerpo si bebes agua no potable?
Diarrea, paludismo o fiebre tifoidea son algunas de las dolencias que puedes sufrir en este caso
Aunque este problema es muy poco común en los países desarrollados, lo cierto es que en algunas ocasiones nos encontramos fuentes u otros puntos similares donde el agua que brota no es apta para el consumo humano. Normalmente, suele estar indicado, pero puede que, por un despiste, una persona beba de ella sin percatarse de su estado. En este caso, el organismo puede experimentar una serie de síntomas o enfermedades que ponen en serio peligro a tu salud.
Esto es lo que ocurre, por ejemplo, en muchos países del mundo. De hecho, hay 160 millones de personas que siguen bebiendo agua que no ha sido tratada previamente y que procede de ríos, lagos u otras aguas de superficie. Una situación que se ha convertido en el segundo problema ambiental más urgente del momento, solo por detrás de la también temida contaminación del aire.
Aunque, por supuesto, en España las probabilidades se reducen considerablemente, ¿qué puede ocurrir si por error bebes agua no potable?
Diarrea
Esta es la enfermedad hídrica más común, causada por los agentes patógenos que viven en el agua. Tal y como exponen diversas fuentes, la mortalidad mundial por diarrea en niños y personas mayores es muy superior a los dos millones, especialmente en Asia y África. Como bien es sabido, la diarrea provoca que el paciente pierda líquidos y electrolitos, lo que desencadena un caso grave de deshidratación que, en algunos casos, puede derivar en su fallecimiento.
Paludismo
Según explican desde Oxfam Itermón (@OxfamIntermon), el paludismo "es una enfermedad provocada por un parásito transmitido a través de ciertos tipos de mosquitos que habitan en zonas de aguas estancadas o en sitios donde el agua no goza de la calidad suficiente". Entre sus síntomas destacan un estado febril agudo, dolor de cabeza, escalofríos y, en el caso de los niños y las personas mayores, anemia grave o dificultades para respirar. Estos suelen aparecer entre 10 y 15 días después de entrar en contacto con el parásito.
Fiebre tifoidea
Esta es otra de las enfermedades más vinculadas al consumo de agua contaminada, así como algunos alimentos que presenten el mismo estado. Su origen radica en la bacteria Salmonella typhi y suele ir acompañada de fiebre elevada y sostenida, dolor abdominal, pérdida de apetito, erupciones cutáneas, dolor de cabeza, debilidad y, en el peor de los casos, el aumento del tamaño del hígado y el bazo. Como dicen los expertos, la incidencia en España es muy baja, aunque eso no implica no seguir ciertas precauciones.
Gastroenteritis y Hepatitis A
Ambas dolencias son provocadas por beber agua no tratada que incluye desechos humanos y de animales. La diarrea y los vómitos son síntomas que comparten, aunque la Hepatitis A, que es una infección del hígado, también puede generar en el paciente una fatiga inusitada, fiebre, pérdida de apetito, malestar abdominal y micciones de color oscuro, entre otros.