Teresa Rey
Preguntas
La terapia con delfines favorece la autoestima y la concentración de mayores con trastornos de salud
La delfinoterapia ayuda a diminuir el estrés o la ansiedad, y a mejorar el equilibrio o motricidad
La compañía de algunos animales tiene en ocasiones efectos terapéuticos y por ello se utilizan en el abordaje de algunos trastornos como tratamientos complementarios. Este es el caso de los caballos y la equinoterapia o de los perros. Pero los defines también se emplean con esta finalidad. La delfinoterapia se utiliza como terapia asistida con animales impartida siempre junto a un terapeuta debidamente formado y para tratar algunas patologías que se presenta tanto en niños como adultos mayores.
Ultrasonidos
No es una terapia que busque sustituir a un tratamiento farmacológico sino que se puede usar como una ayuda adicional en algunas patologías. Entre los principios en los que sustenta este método sobresalen las investigaciones relativas a los sonidos que emiten los delfines. Estos estudios aseveran que los ultrasonidos lanzados por estos mamíferos estimulan el sistema nervioso central de las personas tratadas. Estos provocan que el cerebro humano los reproduzca a la par que los reciben del delfín dando lugar a un efecto relajante, ya que cuando sucede esto se liberan ciertas hormonas relacionadas con esta sensación como la endorfina.
La delfinoterapia se empezó a utilizar en casos de niños con autismo y parálisis cerebral, y se comprobó que su estado de ánimo mejoraba, que estaban más relajados y tenían más tolerancia al contacto físico. Más adelante se realizaron otras investigaciones con menores que presentaban trastornos neurológicos y en los que se apreció cambios en el lenguaje y en su capacidad de movimiento.
Mejoras en adultos
Estudios posteriores han mostrado que el contacto con estos animales en adultos contribuye a mantener los niveles de azúcar en sangre, a regular la presión arterial, además de aportar energía y disminuir la ansiedad y el estrés. Al mismo tiempo estimulan la concentración así como la capacidad de aprender y memorizar. Así, se producen mejorías en el aspecto motriz y cognitivo.
Hay expertos que consideran que no hay suficiente base científica para aseverar que los delfines generan todos estos beneficios, y que en ocasiones se utilizan campañas publicitarias engañosas, atribuyendo a la delfinoterapia propiedades que no tiene.
Quienes la defienden a día de hoy, aseguran que esta terapia produce en general un incremento del bienestar de las personas que la reciben. Se ha demostrado que relaja, ayuda a conciliar mejor el sueño, mejora la autoestima, la motricidad, la concentración o el equilibrio, entre otros aspectos. Es por ello que se utiliza como complemento de enfermedades psíquicas y mentales, en personas con fibromialgia, párkinson, alzhéimer, esclerosis múltiple, depresión y ansiedad. Además de en autismo, parálisis cerebral, lesiones cerebrales, personas con miedos psicológicos diversos o trastornos de comunicación o comportamiento, junto a otras muchas.