Ignacio Casanueva
Ignacio Casanueva es redactor especializado en temas de tecnología y salud.
… saber más sobre el autorMartes 6 de octubre de 2020
ACTUALIZADO : Miércoles 11 de noviembre de 2020 a las 15:29 H
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El pie de atleta o 'tinea pedis' es una infección producida por hongos dermatofitos, es decir, hongos que se alimentan de la queratina de la piel. Su apodo “deportista” viene al producirse muy frecuentemente entre personas que se dedican al deporte profesionalmente.
Se produce en ambientes de calor, húmedos y oscuros como puede ser un calzado, relacionándose con personas deportistas que sudan mucho. Unas características que suelen ir acompañadas la una de la otra.
Al tratarse de un hongo, también puede darse un contagio por contacto directo en superficies como duchas, piscinas, saunas, gimnasios, etc. En concreto, los síntomas más frecuentes son la descamación de la piel en las zonas entre los dedos, que es donde se suele quedar la humedad, aunque también pude extenderse al resto de la planta.
Otros síntomas frecuentes, según apunta, son el prurito o picor en las zonas afectadas y el olor de pies por la descomposición que generan los hongos. En los casos más avanzados, cuando la piel está ya muy débil, se puede llegar a producir grietas en la piel e infecciones bacterianas.
En caso de sufrir descamación, picor, o mal olor se debe sospechar de una posible infección por hongos. Las complicaciones pueden venir si no se trata de manera rápida y adecuada la infección, pudiendo debilitar en exceso la piel, y generando infecciones bacterianas más severas que requieran de tratamiento con antibióticos.
Para poder frenar esta infección por hongos lo más importante es, como lo indicamos a menudo, detectarla lo ante posible para evitar su avance, y por supuesto pautar rápidamente un tratamiento. En este último caso, por norma general consiste en pomadas antimicóticas que se aplican en el pie, y solamente en casos severos se da un tratamiento por vía oral.
Es importante concienciarse de cómo podemos evitar el 'pie de atleta'. Como método preventivo, es importante prestar atención a la humedad que se genera en los pies, sobre todo si se hace deporte, si se pasa muchas horas con calzados cerrados en ambientes húmedos y calurosos, o bien si se padece hiperhidrosis plantar (exceso de sudoración en los pies).
Otra forma de prevenir la aparición de esta infección por hongos es mediante el empleo de calzado que nos proporcionen una buena ventilación. Es aconsejable usar calcetines de fibras naturales como el algodón, o de tejidos sintéticos especializados para el deporte, que favorecen la evacuación del sudor. Si se suda mucho se puede cambiar de calcetines de 2 a 3 veces al día.
Cuando nos duchemos, tenemos que lavar concienzudamente los pies, y una vez que finalicemos, secarlos bien prestando especial atención a las zonas interdigitales.
En caso de exceso de sudoración se pueden aplicar polvos de talco en calcetines y en calzado que nos ayuda a prevenir el acúmulo de sudor y la maceración de la piel.