¿Qué son los pensamientos intensivos y por qué los tenemos?

¿Alguna vez has tenido un pensamiento negativo, perturbador, extraño o dañino que te deja una mala sensación? o ¿hay algo a lo que no paras de darle vueltas? Se trata de pensamientos intrusivos y es más habitual de lo que imaginas.

Nuestro cerebro siempre está generando pensamientos espontáneos. Estos pueden ser positivos, útiles o mundanos, pero no siempre es así. En ocasiones, tenemos pensamientos no deseados de manera involuntaria que pueden llegar a resultar angustiantes como por ejemplo hacer daño a alguien, cometer un delito, hacer algo ilegal, recordar un error de nuestro pasado o una situación de vergüenza, una pérdida de un familiar, una enfermedad, etc.

Uno de los principales temores de las personas que sufren este tipo de pensamientos es que lo que piensan pueda llegar a pasar o puedan llegar a cometer los actos que imaginan en su mente. A veces los pensamientos así nos llegan precisamente porque no queremos actuar de esta manera, sino todo lo contrario. Intentar no tener esos pensamientos empujándolos lejos de nuestras mentes produce el efecto contrario y aparecen con más frecuencia.

Los pensamientos intrusivos pueden manifestarse mediante la visualización de una imagen o como una idea abstracta que tenemos en la cabeza pero que no terminamos de definir.

Muchas personas se sienten avergonzadas y preocupadas por ellos, y por lo tanto los mantienen en secreto. No obstante, si estos pensamientos son muy habituales y llegan a bloquearte o a generar una situación de angustia, deberías consultarlo con un especialista para tratar de controlarlos y ayudarnos a pensar de manera más positiva y saludable.

Pero, ¿por qué tenemos esos pensamientos?

Los pensamientos intrusivos los experimentamos todas las personas. 

Pueden aparecer ante situaciones de estrés o estrés postraumático, trastorno bipolar, trastorno obsesivo compulsivo (TOC), trastorno de ansiedad y ansiedad generalizada (TAG), depresión posparto, culpa excesiva, depresión, si eres una persona que piensa mucho las cosas o te enfrentas a pérdidas o amenazas significativas o cansancio, entre otros.

No obstante, debes saber que:

-Los pensamientos intrusivos son una forma normal y natural de pensar. Es una acción involuntaria del cerebro y no podemos evitarlo.

- Cambia tu estilo de vida si ves que los pensamientos se repiten con frecuencia y son angustiosos. Además, si realizas actividades que tengan ocupada tu mente con cosas positivas y del presente te sentirás mucho mejor.

- Debes saber que tú no eres tus pensamientos. Míralos desde fuera y descarta aquello que no te guste.

Cuando tengas pensamientos intrusivos y recurrentes te recomendamos que los escribas o compartas con alguna persona ajena, de ese modo, lo podrás analizar y, al expresarlo, te liberarás. Además, es importante que tengas en cuenta que no por pensar algo significa que sea cierto. Lo ideal es dejar de pensar en ello para ir tratando de frenar el bucle negativo que nos perjudica.

No debemos obsesionarnos en eliminarlos o evitar que pasen para no desencadenar otros trastornos. Hay una diferencia entre pensamientos y acciones, por ello, debemos quitarles importancia.