La eterna juventud lleva buscándose desde los orígenes de la humanidad, no es algo de ahora. Sin embargo, cada vez podríamos estar más cerca, no de vivir para siempre, pero sí de que gran parte de la población alcance los 100 años e incluso más.
Y es que la mayoría de personas ya no mueren de infecciones –salvo estos últimos años con el Covid– sino por enfermedades crónicas, cuya aparición se consigue retrasar cada vez más e incluso prevenir o curar.
Y para lograrlo, es imprescindible la inversión en ciencia para lograr descifrar cómo se puede "rejuvenecer" las células o descifrar el genoma humano, un fin, para el que los grandes magnates del mundo, como Jeff Bezos o Elon Musk, están invirtiendo grandes cantidades de dinero y que podría materializarse en pocos años, aunque no es seguro si será asequible para todos los bolsillos.
Eso sí, mientras se democratizan estos avances hay decenas de consejos que se pueden seguir para vivir más años.
Unas recomendaciones, que se pueden poner fácilmente en práctica –cuanto antes, mejor– y que están recopiladas en la Guía del antienvejecimiento. Jóvenes con canas del doctor en medicina preventiva Ángel Durantez (@DrAngelDurantez).
Un libro, que fue presentado en una conferencia organizada por el Centro de Investigación Ageingnomics de la Fundación Mapfre (@FM_Ageingnomics), en la feria 'Vida Silver' de IFEMA, en la cual el médico conversó sobre las claves de la longevidad con el director de Promoción de la Salud en la Fundación Mapfre (@fmapfre), Antonio Guzmán.
Las claves
Así, contaba el doctor, lo importante es "vivir mejor hasta que nos toque morir", y para ello, es imprescindible analizar cómo se vive en las blue zones, es decir, los lugares más longevos del mundo, para entender cuál es su secreto.
Y uno de ellos, estudiando casos como el de la isla de Okinawa (Japón) –el territorio con mayor número de centenarios–, es "la actividad física", explicaba el doctor. Pero no sólo hacer deporte una vez cada 'x' tiempo, añadía, sino el estar permanentemente en movimiento.
Por ello, recomendaba, sería interesante que en las sociedades especialmente sedentarias, como las europeas, se fomente el movimiento constante, incluso en el trabajo, con soluciones imaginativas como, por ejemplo, estar "parte del tiempo de pie" u otras alternativas.
Por otra parte, otro factor esencial para vivir mejor más años, proseguía Durántez, es la nutrición. Y prueba de ello es que en las zonas más longevas del mundo tienen una "dieta básicamente mediterránea". "Comen fruta verdura, pescado, huevo, pollo, carne blanca, etc.", indicaba.
Y también tienen una "vida social intensa" y "son solidarios con sus vecinos", apostillaba. Pero, sobre todo, "no tienen estrés", el gran mal de las sociedades modernas, que tanta relación tiene con la salud.
Por último, finalizaba, desde el punto de vista psicológico –tiene una relación estrecha con la salud física–, otra de las claves es que, en las sociedades más longevas, como en Okinawa, "dan sentido a la vida", otro factor esencial para vivir bien mucho tiempo.
Edad biológica
Y sobre todo, explicaba en la misma conferencia realizada en IFEMA, hay que tener en cuenta que, aunque la genética importe a la hora de determinar nuestra vida y de desarrollar algunas enfermedades, no se debe olvidar que el 70% de nuestra salud tiene que ver con "el contexto".
"Por ello, independientemente de nuestro genoma hay que empezar a cuidarse", recomendaba.