Cómo adaptar el hogar para personas con baja audición

La pérdida de audición es uno de los problemas que más afecta a las personas mayores, de hecho, se calcula que alrededor del 50% de los mayores de 75 años tienen presbiacusia, es decir, pérdida progresiva de la capacidad auditiva. Pero no solo afecta a los mayores por efecto del envejecimiento, existen otras causas como infecciones víricas, traumatismos craneales, tumores, la toma de algunos medicamentos o la exposición prolongada a ruido fuerte, entre otras, que pueden producir una pérdida progresiva de la capacidad para auditiva que, poco a poco, va aislando de su entorno a quien la sufre.

Adaptar el hogar con diferentes dispositivos según las necesidades derivadas de la perdida de audición, evitará el aislamiento social de las personas que la sufren y hacer que se sientan mejor y más seguras.

Repetidores y amplificadores de timbres

Ante una pérdida de audición parcial se puede colocar un timbre con control de volumen o que tenga un volumen más alto. Existen timbres adicionales para colocarlos en diferentes estancias.

En el caso de la telefonía, se puede graduar el volumen del sonido del teléfono o instalar un dispositivo inalámbrico para llevarlo en el bolsillo y que suene o vibre en caso de llamada. Otra opción es optar por un teléfono móvil que, además del timbre por vibración, permita hacer videollamadas, lo cual facilita la comunicación ya que se pueden leer los labios.

Avisos por luz

Una de las ventajas que nos ofrecen las nuevas tecnologías es que existen dispositivos que nos permiten sustituir el sonido de una notificación por la luz, es decir, por un estímulo visual. Se pueden instalar diferentes luces por la casa, cada una de ellas de un color al que se le asigna una situación, por ejemplo, si llaman al timbre de la puerta o si suena el teléfono la luz puede ser diferente. En el mercado existen diferentes dispositivos y bombillas para tal efecto.

Avisos por vibración

La vista puede llegar a acostumbrase a los avisos con luces de colores y dejar de ser un estímulo, por lo que es recomendable combinarlo con otros estímulos como las vibraciones. Por ejemplo, para despertarse por las mañanas, se puede colocar debajo de la almohada una alarma o despertador que vibre. También utilizar un reloj inteligente, smartwatch, que actúe como cualquier otro reloj de pulsera, pero que vibre cuando se produzca una llamada, se programe una alarma, o llegue una notificación.

Aplicaciones para el móvil

Algunas aplicaciones para móvil o tableta que se conectan a los dispositivos y a través de luz de colores o vibración te avisan de si están llamando al teléfono, si has dejado algún electrodoméstico encendido, si llaman al timbre o si suena la alarma de incendios, por poner algunos ejemplos. AVA, Petralex, Pedius, Rogervoice o Visualfy, son ejemplos de aplicaciones para móvil que ayudan a reducir algunas de las dificultades con las que se encuentran las personas con pérdida de audición.

Ver la televisión

Para una persona con baja audición ver la televisión significa eso, verla. Para seguir el programa estas personas suelen poner el volumen muy alto, cosa que molesta tanto al resto de los convivientes como a los vecinos.

Una de las soluciones para que esto no ocurra es el uso de unos auriculares. Los hay que son inalámbricos y permiten desplazarse por el salón. Si se ve la televisión en compañía, se puede optar por unos que emitan a la vez tanto por el auricular como por los altavoces del televisor.

Por último, también es recomendable activar los subtítulos.