Supuestos trabajadores de diversas compañías, como gas o luz, que entran en las viviendas para hacerse con objetos de valor y datos personales, como cuentas corrientes. Es la nueva estafa de la que ha alertado la Policía Nacional de Cantabria, y que afecta principalmente a las personas mayores.
En concreto, el método de actuación de los estafadores, según explica la Policía en un comunicado y recoge Europa Press, consiste en una primera llamada telefónica que realizan a las víctimas. En ella, les explican que son trabajadores de alguna de estas empresas y que efectuarán en sus viviendas una visita, con la excusa de una supuesta campaña de promoción o para arreglar algún problema técnico.
Seguidamente, pasan a realizar a las víctimas una serie de preguntas para obtener la mayor información posible sobre ellas, como el número de personas que viven en el domicilio, incluso los horarios y rutinas que tienen, así como otros datos personales.
En el momento de la visita, los estafadores distraen a la víctima para recorrer el interior de la vivienda en busca de objetos de valor. Llegan incluso a solicitar un número de cuenta para una devolución de dinero, datos personales con los que cometerían actividades delictivas, señalan.
Cómo actuar
Debido al aumento de casos registrados, la Policía ha alertado de esta nueva modalidad de estafa a los ciudadanos de la región, sobre todo a las personas mayores, para que estén alerta ante posibles llamadas de este tipo. En el caso de que ocurra, han ofrecido algunas recomendaciones sobre cómo actuar:
No facilitar datos personales.
Ante la sospecha de que pueda tratarse de una estafa, ponerse en conocimiento de la Policía lo antes posible.
Recavar todos los datos de los que dispongamos de la estafa para poder ofrecerlos a la Policía si fuese necesario.
No abrir la puerta ni permitir su acceso a supuestos trabajadores de empresas de suministros del hogar, como técnicos de gas, electricidad, agua o internet, si no se ha solicitado previamente. Tampoco a técnicos, médicos, enfermeros o servicios sanitarios que acudan para una asistencia a domicilio que no se ha solicitado, representantes de la Administración o repartidores de comida que no hemos comprado.
Sobre el autor:
María Bonillo
María Bonillo es licenciada en Comunicación Audiovisual y Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Escribe principalmente sobre temas de sociedad. También tiene experiencia en comunicación corporativa de empresas como OmnicomPRGroup y Pentación Espectáculos.