Alicante crea la 'no rotonda'

El Ayuntamiento de Alicante ha aprobado la construcción de un innovador proyecto de tránsito en el área empresarial de Las Atalayas, a las afueras de la ciudad. Esta ‘no rotonda’ pretende facilitar el tráfico peatonal a su vez que reducirá el paso de vehículos. Además, el objetivo es mejorar la sostenibilidad y mejorar el paisaje al introducir una zona de jardín de 700 metros cuadrados. 

Este proyecto se engloba dentro de un proceso de modernización de este área empresarial para conseguir la catalogación como ‘Área Industrial Avanzada’. La inversión total consistirá en 269,697,14 euros y el plazo de ejecución será de cinco meses, con el objetivo de que esté disponible en el año 2023.

Más para el peatón, menos para el coche

La ‘no rotonda’ es un espacio opuesto a las rotondas convencionales, ya que, en esta nueva concepción, el asfalto no se cruza en ningún momento con la zona peatonal. Según el propio ayuntamiento, “al llegar al punto de encuentro, cada calzada continúa por la calle perpendicular que le corresponde, separándose una de otra y generando una plataforma blanda en el espacio intersticial entre ellas”. También reduce los carriles de circulación de vehículos a uno solo, limitando así su circulación. 

Este proyecto genera un continuo espacial para los peatones, que podrían cruzar de acera a acera sin pisar asfalto. Este continuo no se extiende para los coches, que, al llegar al centro de la ‘no rotonda’, las calzadas se desvían hacia las calles correspondientes, dejando el espacio interno libre para esta zona ajardinada, accesible a los peatones. 

La idea también pretende facilitar la instalación de terrazas, permitiendo la proliferación de bares y la ampliación de los ya existentes en la zona. Además, el proyecto disminuiría de forma radical los accidentes de tráfico, pues eliminaría los cruces entre vehículos, así como entre coches y peatones. 

Con este proyecto innovador, se inicia una nueva forma de urbanismo ¿Se empezarán a sustituir las rotondas por 'no rotondas? ¿Estamos ante una nueva forma de pensar las ciudades?