Sociedad

Ana Bedia: "Los medios tenemos que informar sobre el suicidio, pero la forma de hacerlo importa"

Raúl Arias

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Ana Bedia, directora de 65YMÁS, destaca la importancia de cuidar la forma en la que los medios de comunicación informan sobre el suicidio, tema que ha abordado en la III Jornada sobre Psicología y Suicidio, que se ha celebrado esta semana en el Colegio Oficial de Psicología de la Región de Murcia, junto con el Diario La Opinión de Murcia.

Ana Bedia ha participado en la mesa redonda titulada: 'Desde la experiencia, qué vemos y qué hacemos', junto a Jaime Gutiérrez Rodríguez, Coordinador del GT de Psicología del Envejecimiento, vocal del Consejo General de la Psicología de España y Decano del Colegio Oficial de Psicología de Castilla y León; Ángel Ruiz Ramírez, Coordinador GIPEC del Colegio Oficial de Psicología de la Región de Murcia y Experto en el abordaje de la conducta suicida en emergencias; y Pablo Avilés Martínez, profesional centros de personas mayores. 

Un interesante debate, moderado por Cristina Pastor, responsable del área de psicología de la intervención social del Colegio Oficial de Psicología de la Región de Murcia, en el que la directora de 65YMÁS ha explicado, durante su intervención titulada: 'Cómo informar del suicidio para personas mayores', la necesidad de que los medios de comunicación se asesoren recurriendo a expertos a la hora de informar sobre temas tan delicados como es el del suicidio.

Ana Bedia ha indicado que "65YMÁS ha desterrado viejos tabús relacionados con la información sobre los suicidios, si bien es cierto que a diferencia de los casos de Jóvenes, en los que se dan más detalles, con los mayores se proporcionan menos o ninguno y es una problemática sobre la que se habla menos". Considera que el suicidio y en concreto el suicidio de personas mayores "es un drama silenciado, por el que jornadas como la del Colegio Oficial de Psicología de la Región de Murcia y el Diario La Opinión de Murcia, son especialmente importantes. Y más teniendo en cuenta que: pese a que no acapare titulares, el colectivo con la tasas más alta de defunciones es, de lejos, el de los mayores de 80 años, y en concreto en la franja de 85 a 89 años. Una incidencia muy superior a la de, por ejemplo, los más jóvenes".

La directora de 65YMÁS ha comentado que "en la carrera de periodismo y en las redacciones se nos enseñaba que no se debía informar sobre los suicidios con el argumentario de que informar sobre este tema causaba efecto contagio, una máxima que ha ido evolucionando en los medios de comunicación que cada vez informan más sobre esta realidad silenciada. En 65YMÁS consideramos que es un tema del que se debe hablar, pero es muy importante cuidar la forma en la que se comunica. Y al igual que hay que cuidar la forma de comunicarlo a los jóvenes se debería tener en cuenta la forma de comunicarlo a los mayores".

Ana Bedia considera que en esta tarea los expertos son esenciales y pueden ayudar a los medios de comunicación. "Nuestra labor como periodistas es informar con rigurosidad y sin sensacionalismos". Así, de las conclusiones de la mesa de debate anteriormente mencionada se puede extraer un decálogo sobre cómo informar del suicidio para personas mayores:
 

  1. NO USAR EDADISMO EN EL LENGUAJE: hay que empoderar a los sénior, hablarles con respeto y no utilizar tonos paternalistas ni infantilizarlos.
     
  2. Evitar la comunicación idealizada o sensacionalista sobre el suicidio.
     
  3. RIGUROSIDAD EN LA INFORMACIÓN: Tratar las noticias con respeto, usar fuentes de confianza y solo publicar hechos constatados. Evitar especulaciones, detalles escabrosos o repetitivos. Extremar la precaución cuando el suicidio es de una persona famosa o provoca especial alarma social por su edad, el método elegido o la situación en la que se gestó. 
     
  4. DAR MUCHA IMPORTANCIA DE LA PREVENCIÓN. Publicar también noticias sobre testimonios de personas en crisis que logran superarlas, que afrontaron sus circunstancias de forma adecuada y pidieron ayuda. Publicar noticias destacando la importancia de cuidar la salud mental.
     
  5. INFORMAR DE LOS TELÉFONOS Y ALTERNATIVAS DE AYUDA: publicar contactos de diferentes servicios de apoyo, prevención y postvención del suicidio. Hacer mención a recursos de ayuda para sobrevivientes, supervivientes y familias en crisis. Nombro métodos de abordaje eficaces, la necesidad de pedir ayuda y señalo a las personas que sufren que no están solas.
     
  6. Poner en valor a los sénior y proporcionar información sobre actividades de ocio, emprendimiento, voluntariado: propósitos vitales.
     
  7. Cuando se ofrecen estadísticas, usar fuentes fiables e interpretarlas de forma correcta, sin expresiones valorativas que contribuyan a alarmar innecesariamente. 
     
  8. Asesorarse consultando con expertos sobre cuál es la mejor manera de comunicar estos casos. Si se tienen dudas sobre cómo comunicar, contactar con profesionales especializados.
     
  9.  Empatía: Ser solidario con el dolor de los supervivientes, no contribuir a aumentarlo. Huir el morbo.
     
  10. Tratar con respeto a los intervinientes en emergencia y de primera línea (sanitarios, bomberos, policía). Evitar culpabilizar a la víctima del riesgo para la vida de estos. 

Sobre el autor:

Raúl Arias

Raúl Arias

Raúl Arias es periodista especializado en Política, Economía y Sociedad. Licenciado en la Universidad Complutense de Madrid, ha trabajado en diferentes medios de tirada nacional, siempre pegado a la actualidad.

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