"Según iba evolucionando la pandemia se veía que había que imponer medidas un poco más duras para atajar esto entre todos. Medidas había que tomar y ya que se han tomado, ahora solo cabe esperar que sean efectivas y se vaya controlando el virus", explica Julián Gutiérrez, secretario general de la Federación de Pensionistas y Jubilados de CCOO cuando le preguntamos la opinión de su sindicato sobre el nuevo estado de alarma que llega con confinamientos por toda España y en el que las autonomías decidirán las medidas que aplican en sus territorios, salvo el toque de queda obligatorio de 15 días entre 23.00 y 6.00 que algunas retrasan y otras adelantan una hora.
En el mismo sentido, Anatolio Díaz, secretario general de la Unión de Jubilados y Pensionistas (UJP) de la UGT, apunta que "nosotros pensamos que tal y como está la situación, alguna decisión había que tomar porque, sobre todo en lo que se refiere a colectivos de mayores, el tema se estaba volviendo a complicar mucho, porque aunque este caso también afecta a otros colectivos los mayores vuelven a estar, por así decirlo, en el ojo del huracán como los principales afectados de esta nueva situación".
Foto: Anatolio Díaz, secretario general de UGT-UJP
Así las cosas, el secretario general de la UJP nos dice que "desde ese punto de vista era totalmente necesario e imprescindible que el gobierno central articulara mecanismos que permitieran a las CCAA ver de qué forma es la más idónea para hacer frente a la situación". Lo cual no quita para que los mayores de UGT pongan un pequeño pero a la resolución adoptada y es que "quizás echemos de menos que, de una vez por todas, se articulen mecanismos de forma generalizada para todo el país. Volver a dejar en manos de cada comunidad la interpretación de la norma sin tener exclusivamente en cuenta la situación sanitaria nos coloca ante un tema difícil de entender y de asumir. Que en unos sitios se hagan unas cosas y en otros otras, es un poco de locos", se lamenta Anatolio Díaz para quien "deberían ser medidas más coordinadas y para todas las CCAA porque la pandemia no hace distinciones entre un territorio u otro". "Lo contrario no está bien y va a repercutir negativamente en la economía. Si esto no se tiene en cuenta no vamos a atender lo principal, que es la salud, ni tampoco a lo secundario, que es la economía", concluye Díaz.
"Realmente creo que no saben por donde se andan", se lamenta al respecto Juan Manuel Martínez, médico geriatra y presidente de la Confederación Española de Organizaciones de Mayores (CEOMA), para quien "está bien que un país, a nivel nacional, de unas normas que luego las CCAA ,que son las que están más cerca de los ciudadanos, tomen las medidas concretas a partir de las directrices del gobierno. Me parece bien, siempre y cuando se tenga en cuenta que los mayores somos un grupo social más que, efectivamente, tenemos una situación de mayor riesgo a la hora de padecer covid-19, pero nada más, en todo lo demás debemos ser iguales al resto de la población".
Foto: Juan Manuel Martínez, presidente de CEOMA
Y con respecto al toque de queda, el doctor Martínez apunta que le parece bien e incluso que él podría ser partidario de imponerlo, como en Francia a las nueve de la noche. Siempre sin olvidar que "se nos puede hundir todo el país. Entiendo que han puesto las 10, las 11 y las 12, para que la hostelería pueda dar un servicio, pero desde mi punto de vista, personal y médico, estoy más de acuerdo con las 9 que con las 11".
"No hacer otra cosa más que criticar, criticar y criticar"
"Yo creo que adoptar estas medidas es una decisión correcta", nos confiesa desde el País Vasco José Luis Elosua, presidente de Nagusilan. "Al no tener actualizado el tema jurídico, se ha tenido que tomar esta opción. No ha habido más remedio que adoptar la única solución que había ante el avance tan fuerte del coronavirus", nos dice Elosua antes de matizar que "con lo que no estoy conforme es con el comportamiento del PP, con que esté ahí todavía dudando o aprovechando la situación para, en lugar de colaborar, no hacer siempre otra cosa más que criticar, criticar y criticar. No me parece correcto en la situación que estamos viviendo".
Vicente Sanz, presidente de CONJUPES también nos aporta su "opinión personal", haciendo hincapié en el hecho de que entiende "que la situación sanitaria y epidemiológica lo exige, porque si no los hospitales¡ empezarán a tener problemas y todo lo que sea adelantarse a esas circunstancias, bienvenido sea".
Foto: Vicente Sanz, presidente de CONJUPES.
Ahora bien, el presidente de CONJUPES también acota que "respecto al toque de queda, pero veo un poco de descoordinación y de que volvemos a dejarlo todo a lo de siempre. Yo me quejo de que no haya un registro único que nos de una referencia exacta y veraz de la situación de la pandemia. La cogovernanza tiene su parte buena, pero también su parte negativa que es que cada CCAA actúa un poco a su libre albedrío mientras yo creo que las decisiones tenían que ser únicas y exclusivas para godo el país".
"Los mayores no salimos a las once para hacer botellón"
Otra de las organizaciones que están de acuerdo en que era necesario tomar medidas es AGMT, Mayores Telefónica, que por voz de su presidente, Santiago González Carrero, nos explica que "tomar algunas medidas restrictivas a la movilidad parece obvio. Otra cosa es cuándo se han tomado y el remedio que puedan llegar aportar". Aclara González Carrero que "desde el punto de vista de las personas mayores, tal vez esas restricciones ya nos las hemos autoimpuesto la mayoría de nosotros porque no solemos ser de los que salen a las doce de la noche. Lo bueno de ellas es que a la juventud que sale y sale, como hemos visto en televisión, indisciplinadamente y de forma masiva, estas normas les hagan reflexionar, dejen de hacerlo y dejen de ser potenciales transmisores del virus".
Foto: Santiago González Carrero, presidente de Mayores Telefónica
De manera muy asimilar se expresa Marina Troncoso, presidenta de la Confederación Estatal de Asociaciones y Federaciones de Alumnos y Exalumnos de los Programas Universivarios de Mayores (CAUMAS). "No lo hemos comentado aún en la Confederación, de hecho este martes tenemos una videoreunión para tratar el tema. Pero en principio nos parece lo mismo que a la mayoría, que no sabemos por donde andamos. Que las medidas pueden ser buenas, pues seguramente, que se pueden hacer otras cosas, seguramente también, pero es que estamos totalmente desinformados. No podemos decir que sea bueno ni malo porque no lo sabemos, no tenemos información". Aunque si hay algo que tienen claro en CAUMAS, como en AGMT, es que "en Vigo lo vivimos con bastante tranquilidad y a los mayores no nos afecta el toque de queda porque no salimos de casa a las 11 de la noche para hacer un botellón, aunque, eso sí me parece una buena medida para evitar comportamientos irresponsables".
Foto: Paca Tricio, presidenta de UDP
Quizás un buen resumen de todo lo anterior es lo que nos dice Paca Tricio, la presidenta de la Unión Democrática de Pensionistas (UDP) cuando apunta: "¿Qué voy a valorar? Yo lo único que puedo decir es que se acabe con el coronavirus como sea, pero que se acabe. Esta muriendo mucha gente y la pandemia continúa extendiéndose".
Seis meses son muchos meses
Por lo que a los seis meses de Estado de Alarma que pretende solicitar el Gobierno al Congreso, las opiniones de los mayores también parecen todas, muy unificadas.
"La duración de seis meses me parece un poco larga, tal vez debería haber sido un periodo más corto y en función de cómo evolucionase la pandemia se iría ampliando o recortando. Seis meses me parecen excesivos"!, reconoce desde CCOO Julián Gugtiérrez para quien "lo que realmente hace falta es que entre el gobierno y los partidos haya una unidad de criterios sobre la pandemia, porque si la enfrentamos divididos no vamos a ser capaces de frenarla. Creíamos que se había terminado pero hemos visto que no, tanto en España como a nivel europeo mundial".
Y el representante de CCOO pone un ejemplo de unidad de criterios que sí ha funcionado: "Creo que en los meses que llevamos de pandemia se han dado ejemplos de responsabilidad muy importantes, de hecho, los agentes sociales, sindicatos, patronal y gobierno han sido capaces de llegar a un acuerdo sobre medidas que eran muy necesarias y que nos han llevado a todos a ceder, han cedido los sindicatos, la patronal y el gobierno. Eso es lo que hay que buscar también para combatir a pandemia, consenso, mucho diálogo y que nadie se levante de la mesa hasta que no se alcance un acuerdo. Y si aún así es imposible, que cada uno asuma su responsabilidad".
Por su parte, desde UGT, Anatolio Díaz nos explica que, para él, "lo de los seis meses es una estrategia de negociación. El gobierno plantea un escenario a medio o largo plazo porque sabe que tiene que negociar con el resto de los partidos y por eso pone el listón alto para luego quedarse a medio camino. Pienso que al final, poder llegar a febrero o marzo sería hablar de unas fechas razonables sin necesidad de tener que estar constantemente en el Congreso para renovar la situación".
Responsabilidad ciudadana
También se lamenta Vicente Sanz del periodo de seis meses: La duración de seis meses me parece un poco exagerada. Me imagino que el gobierno lo hará con vistas a no estar todos los días en el Congreso pidiendo prórrogas, pero lo veo un poco exagerado". Por otra parte, añade el presidente de CONJUPES, "los confinamientos perimetrales conforman un caos tremendo porque la mayor parte de la gente no sabe por donde puede moverse, no se entienden muchas cosas. Aunque bien es cierto que a mí, todo lo que sea limitar la capacidad de movimientos no me resulta agradable. Hay que apelar a la responsabilidad de ciudadano.
"Tampoco sabría decir si es mucho o poco un plazo de seis meses, aunque confieso que, de entrada, me parece mucho, si bien es cierto que hay que poner normas a largo plazo, no vale una semana ni quince días. Y si este año tenemos que pasar las navidades con una familia muy reducida y sin ir de compras, pues así lo haremos porque sabemos que es para que las próximas sí podamos celebrarlas. Somo nosotros mismos los que tenemos que concienciarnos de que hay cosas que no se pueden hacer y no hacerlas", explica Marina Troncoso desde Vigo.
Foto: Marina Troncoso, presidenta de CAUMAS
"Sobre lo de los seis meses", declara Santiago González Carrero, "creo que es para no tener que andar constantemente pidiendo prórrogas al Parlamento. Además, tener un plazo largo no quiere decir que luego termine por aplicarse completamente. Al final la duración será la que marque el proceso de vencer al coronavirus. Lo que todos deseamos es que no sea necesario que lleguemos hasta mayo".
Juan Manuel Martínez, sin embargo, nos explica: "Veo bien la duración de seis meses porque no es rígida sino que contempla la posibilidad de cambiar en un momento determinado. No me parece mal teniendo en cuenta que esto puede variar. A mí, realmente no me parece mal".
El fantasma de las residencias
También resulta imposible no preguntarle a nuestros mayores por el fantasma que, por desgracia, vuelve poco a poco a tomar forma en nuestras residencias donde contagios y muertes no dejan de producirse a diario.
"El problema de las residencia que es absolutamente sangrante. Deben ponerse los medios para las que personas residentes tengan la máxima seguridad. Se ha avanzado bastante desde el estado de alarma de marzo, pero parece que las medidas que se toman son insuficientes", denuncia Julián Gutiérrez desde CCOO antes de aclarar que "no es que se hayan olvidado al cien por cien de las residencias, pero hay que poner más empeño en el tema porque siguen muriendo muchas personas mayores. Hay que poner más medios, rastreadores, médicos de atención primaria y traslados rápidos a los hospitales para que no ocurra lo que ya sucedió hace unos meses".
Foto: Julián Gutiérrez, secretario general de la Federación de Pensionistas de CCOO
También Anatolio Díaz se hace eco de la profunda preocupación de UGT-UJP. "Siguen muriendo mayores en las residencias porque no hemos aprendido. Durante la primera ola se comprobó que las residencias estaban dejadas de la mano de Dios, no había absolutamente nada para poder hacer frente a la pandemia", recuerda con tristeza antes de denunciar que "ahora nos encontramos con que empezamos a tener el mismo problema de antes y resulta que no tenemos nada preparado para enfrentar esta situación. No hemos aprendido absolutamente nada y los mayores vamos a seguir muriendo en las residencias y en soledad, y eso, eso es lo peor que puede volver a pasarnos".
"Nadie da la cara por lo que vuelve a pasar"
"A nivel nacional, el tema de las residencias se menciona muy poco. Aquí, a nivel autonómico, del País Vasco, la oposición está por medio, los mayores también lo estamos y sí se están haciendo cosas, no como al comienzo de la situación anterior cuando en las residencias se dejaba morir a la gente y allí se acababa porque no se estaba preparado para aquello", apunta con esperanza José Luis Elosua.
Foto: José Luis Elosúa, presidente de NAGUSILAN
"El de las residencias es otro de los problemas tan evidentes como muy serios", reconoce el presidente de CONJUPES, sanitario de profesión. "Se habla mucho pero no se toman decisiones para el cambio de modelo", denuncia. "Casi volvemos a estar un poco en el punto de partida aunque los índices de mortalidad en las residencias son menores a los de la primera ola. Pero volvemos a tener muertos y esperemos que no se vuelva de nuevo a las situaciones de triaje".
Y es que, explica Santiago González Carrero, "aquí ni se ha hablado de residencias ni de hospitales, al final sigue habiendo la tentación de dar cobertura según puedan entender los sanitarios que las personas tienen más posibilidades, o menos, de seguir adelante y sobrevivir. Es una discriminación absolutamente inaceptable respecto a las personas mayores. Que en hospitales y residencias no se cuide con el mismo esmero a los mayores que ha cualquier otro ciudadano es algo muy complicado que, seguro, va a volver a ocurrir".
Foto: Blas Esteban, presidente de CEATE
"Ni el gobierno ni nadie ha dado la cara por lo que está volviendo a pasar en las residencias", se lamenta Blas Esteban, presidente de CEATE. "Siguen siendo las grandes olvidadas de esta situación. No hay más que fijarse en lo que aparece en los medios, en general, sobre la investigación que se está haciendo en las residencias", apunta Esteban que cree "que a los políticos no les interesa absolutamente nada este tema, solo a los afectados y a sus familiares y amigos. Es una verdadera pena lo que está pasando en las residencias".