Para el año 2030 se estima que alrededor de 3 de cada 5 personas vivirán en un área urbana, todo ello mientras los residentes envejecen. En España, en el año 2050, las personas mayores de 65 años representarán más del 30% del total de la población, y los octogenarios llegarán a superar la cifra de cuatro millones, tal y como indica la Fundación General CSIC. Mientras que la proporción de la población mundial de 60 años se duplicará del 11% en 2006 al 22% en 2050.
Por eso es necesario impulsar políticas, programas, productos y servicios de salud y bienestar para apoyar el envejecimiento activo. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), un mundo amigable con las personas mayores permite a las personas de todas las edades participar activamente en las actividades de la comunidad y trata a todos con respeto, independientemente de su edad.
Sin embargo, la gran mayoría de las personas mayores viven en entornos que no han sido diseñados teniendo en cuenta sus necesidades y capacidades. La Guía de ciudades amigables con las personas mayores de la OMS destaca 8 dominios que las ciudades pueden abordar para adaptar mejor sus estructuras y servicios como son: el entorno construido, el transporte, la vivienda, la participación social, el respeto y la inclusión social, la participación cívica y el empleo, la comunicación y el apoyo comunitario y servicios de salud.
Barcelona, ciudad amigable con los mayores
En este contexto, el Ayuntamiento de Barcelona ha compartido una nota de prensa explicando que ha puesto en marcha el plan Barcelona: ciudad amigable con las personas mayores 2022-2030, para conseguir los objetivos mencionados anteriormente, y lograr que los mayores cuenten con más servicios, equipamientos y apoyos.
Ayuntamiento de Barcelona
En la ciudad condal viven casi 350.000 personas mayores de 65 años, un 21,1 % del total de la población, de ahí la importancia del plan.
En total son 26 las acciones que se van a llevar a cabo para poder dar respuesta a los principales de la ciudad con sus mayores que son la soledad no deseada, la longevidad, la transformación digital, los cuidados, las relaciones intergeneracionales y la accesibilidad.
El plan se ha estructurado en torno a cinco ejes (empoderamiento, respeto y buen trato, erradicación de la soledad, relaciones intergeneracionales, participación cívica y social y espacios, equipamientos y servicios), y cuenta con la aprobación del Consejo Asesor de las Personas Mayores de Barcelona.
¿Qué es una ciudad amigable?
Una ciudad amigable con las personas mayores fomenta el envejecimiento activo ofreciendo oportunidades de salud, participación y seguridad que mejoren la calidad de las personas a medida que pasan los años, adaptando las estructuras y servicios para que sean accesibles e inclusivas con diferentes necesidades y capacidades, así por ejemplo los vecindarios deben ser seguros, los edificios sin barreras y las calles deben facilitar una mayor movilidad.
El Proyecto Ciudades Amigables con las Personas Mayores forma parte de la estrategia de la OMS para la década del Envejecimiento Saludable (2021-2030), en el marco de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible. En España, el proyecto, coordinado por el IMSERSO, cuenta con 197 ayuntamientos adheridos que trabajan para ser reconocidos como ciudades amigables. Y que tras una investigación inicial, han elaborado un diagnóstico de la realidad social de las personas mayores en el municipio y un plan estratégico de acción, para su implementación y seguimiento, con la participación de las personas mayores de la comunidad.
Sobre el autor:
Laura Moro
Laura Moro es graduada en Periodismo y Comunicación Audiovisual por la Universidad Carlos III de Madrid, y está especializada en temas de salud y género. Su trayectoria profesional comenzó en Onda Cero Talavera.