Margarita Morozova es una bibliotecaria rusa jubilada de 87 años, y en ese tiempo, a 1.400 kilómetros de distancia de donde reside, vivió el asedio de Leningrado durante la Segunda Guerra Mundial. Ahora, ha tenido que vivir también los bombardeos aéreos por parte de Rusia en la ciudad donde vive, en Kharkiv (Járkov).
La ciudad ucraniana de 1,5 millones de habitantes se encuentra a 25 kilómetros de la frontera con Rusia y ha sido bombardeada por ataques aéreos y cohetes rusos, afectando a muchos edificios que han quedado reducidos a escombros.
"Nunca pude imaginar que una nueva guerra comenzaría en mi vejez. En mi peor pesadilla, ni siquiera podía imaginar que una masacre así se repetiría, es horrible", explicaba a la agencia de noticias Reuters.
En 1941, Morozova vivió el ataque de las fuerzas alemanas a la ciudad soviética de Leningrado en Rusia, que ahora se conoce como San Petersburgo. En ese momento, Morozova tenía solo siete años, pero explica que aún tiene recuerdos "vívidos" de los bombardeos nazis, en una ciudad donde murieron alrededor de 1,5 millones de personas durante dos años de bloqueo: ella y su madre perdieron un ferry que salía del puerto, y seguidamente vieron cómo el barco era destruido por los proyectiles alemanes.
Después de la guerra se mudo a Járkov, en Ucrania, donde ha vivido durante los últimos 60 años y ahora está reviviendo ese horror del pasado. "En mi infancia me escondía de los bombardeos en los pasillos. Nos refugiábamos en edificios antiguos. Y ahora es lo mismo", explicaba. "Una vez que comienza el bombardeo de Kharkiv, cuando suena la sirena de ataque aéreo, vamos al corredor. No sabemos si nos protegerá o no", añadía. "Es aterrador cuando mueren jóvenes, cuando se derrumban hermosos edificios".
La ciudad de Járkov ya sufrió las disputas entre las fuerzas alemanas y las rusas durante la Segunda Guerra Mundial, cambiando de manos varias veces. Sin embargo, eso no lo hace más sencillo para sus ciudadanos. "Vimos la guerra y sabemos cómo es", afirma Morozova. "Quiero que termine la guerra, quiero que dejen Ucrania en paz. Ucrania es un país independiente. ¿Qué están haciendo aquí?".
Morozova cree que lo que está sucediendo dejará consecuencias desastrosas para ambos lados "también para el pueblo ruso". "Sus hijos mueren por nada". "¿Para qué?", se pregunta. "Durante la Gran Guerra Patria, bueno, estaba claro que luchamos contra fascistas, gente diferente. Mientras aquí, son gente amable. Tenemos culturas comunes y cercanas. Los idiomas son cercanos. ¿Cómo es posible que haya sucedido? Es terrible".
Sobre el autor:
María Bonillo
María Bonillo es licenciada en Comunicación Audiovisual y Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Escribe principalmente sobre temas de sociedad. También tiene experiencia en comunicación corporativa de empresas como OmnicomPRGroup y Pentación Espectáculos.