Carlos Blanco Cocho
Sociedad
Cinco ciberfraudes poco conocidos pero muy comunes en los que muchos caen
¡Cuidado! Algunos no son fácilmente detectables
No es ningún secreto que cada vez pasamos más tiempo en Internet. Lo utilizamos para reservar citas, comprar comida y ropa, adquirir entradas para conciertos... Casi todo lo que hacemos hoy en día pasa, de una manera o de otra, por ahí. Y en una de esas operaciones, cada vez resulta más común que uno se encuentre con un fraude. "Todos, en un momento u otro, podemos estar pensando en otra cosa y realizar una compra rápida, y así es como muchas veces, por esa rapidez, caemos en los engaños", explica Jordi Serra, profesor de los Estudios de Informática, Multimedia y Telecomunicación de la Universidad Oberta de Catalunya (UOC).
Según los expertos, la manera más fácil de evitar pasar a engrosar la creciente lista de afectados por delitos informáticos se encuentra en la protección y en la prudencia. Es por ello que desde la UOC han recopilado los consejos más útiles para estar preparado frente a los cinco ciberfraudes más comunes de la red.
1. Bizum inverso
Seguramente ya haya usado la función 'bizum' que, aunque ciertamente trae consigo gran comodidad y rapidez a la hora de transferir pequeñas sumas de dinero, reviste también algunos peligros. Puede ser un arma de doble filo. Los delicuentes se aprovechan de la opción de solicitar dinero y mandan una petición al móvil de su víctima, quien, si no está atenta, le da a aceptar –la notificación guarda gran parecido con la que llega cuando se recibe un 'bizum'–. Automáticamente, se envía el dinero al solicitante.
"Contra ese fraude, lo único que podemos hacer es no actuar deprisa y asegurarnos antes de lo que nos están diciendo, ya sea por una llamada o con un mensaje", explica Serra. Por su parte, David Megías, catedrático de Informática de la UOC, sitúa una de las claves en "desconfiar siempre de los canales que no están autenticados, incluso si creemos que conocemos a la persona que contacta con nosotros".
2. El timo de Wallapop
Las aplicaciones de compraventa de artículos de segunda mano, como Wallapop o Vinted, ofrecen a los ciberdelincuentes una oportunidad muy jugosa de aplicar sus métodos. En este caso, suelen mostrar gran interés por comprar lo que se anuncia, convencen al vendedor para que continúen la comunicación a través de WhatsApp o Telegram y, una vez allí, consuman el fraude. Mandan un enlace a través del que dicen pagar y, cuando el vendedor introduce sus datos bancarios, proceden a robarle sus ahorros.
"Nunca hay que confiar en las personas que nos pidan pagar fuera de la plataforma, porque, además, no quedará constancia de la venta o compra", recuerda Serra.
3. Estafas en TikTok
TikTok, la red social que más fuerte pega entre los adolescentes no escapa a los fraudes. De hecho, el método criminal en este caso parece especialmente pensado para atrapar su atención y lograr engañarles. El procedimiento es el siguiente: generan contenidos falsos, cuya etiqueta contiene un enlace y, a veces, la recomendación de una cuenta que se hace pasar por una persona famosa –un influencer o un creador de contenido–. Una vez se sigue la ruta del enlace, aparecen plataformas fraudulentas donde se llevan a cabo las estafas.
"El consejo general es que nunca se realice ninguna transacción por haber visto un enlace en un vídeo o en un comentario de una red social. Las páginas que visitemos para realizar nuestras transacciones deben ser totalmente contrastadas", afirma Megías. Por su parte, Serra añade que la inmediatez con la que se consume los contenidos de TikTok, hace que los chicos caigan más fácilmente en phising -un tipo de engaño que se basa en obtener la confianza de la víctima-.
4. Bitcoins falsos
Lo primero que recomiendan los expertos a las personas que quieren adentrarse en el complejo mundo de las criptomonedas es la cautela. En él, los ciberdelincuentes esperan a la vuelta de la esquina para hacer que la gente invierta su dinero en bitcoins falsas. Una vez otorgado, esa suma no vuelve a aparecer. Tal y como reflexiona Megías, "han aparecido múltiples plataformas de gestión de criptomonedas, monederos y claves, y, obviamente, algunos delincuentes se han aprovechado de la complejidad de estos sistemas para ofrecer servicios fraudulentos o estafas piramidales".
El principio fundamental que debe guiar nuestros primeros pasos en este universo, novedoso y muy complicado de entender, es el de no confiar nunca en nadie que no haya acreditado su autenticidad de manera convincente. Para ello, continúa Megías, una de las mejores medidas consiste en limitarse a invertir en criptomonedas cuya fiabilidad esté debidamente contrastada, como la propia Bitcoin.
5. La 'prima' de WhatsApp
El último de los fraudes de la lista de la UOC ha cosechado una gran cantidad de memes en las redes sociales. Se trata de un mensaje cariñoso –y evidentemente falso– proveniente de un supuesto familiar que vive lejos y que, de repente, tiene la imperiosa necesidad de tu dinero o de tus datos personales. Para no caer en estos fraudes, lo más sencillo suele ser limitarse a bloquear al número sin mediar mensaje, pero, si no se sigue ningún enlace de pago, no suele haber riesgo. En cualquier caso, la desconfianza es la mejor forma de evitar estafas. "La credulidad es el máximo aliado de los estafadores", concluye David Megías.