Cómo cuidar a tu perro anciano

Los perros son, para muchas personas, compañeros imprescindibles en su vida. Sus cuidados son muy importantes, especialmente con el paso del tiempo. A partir de los siete años, se considera que ya son perros ancianos y, al igual que las personas mayores, sus necesidades también cambian.

Para mantener su salud y darles unas condiciones de vida idóneas, hay algunos aspectos a los que hay que prestar especial atención. Estos son algunos consejos para que su bienestar perdure y podamos disfrutar de su compañía por muchos años más.

1.- Visitas al veterinario rutinarias

A medida que el perro envejece, los problemas de salud se hacen más frecuentes. Aumenta el riesgo de desarrollar tumores, artritis o problemas cardíacos. Para tratarlos y curarlos, la detección precoz es absolutamente fundamental. Por tanto, las visitas al veterinario se convierten en una rutina ineludible. Solo con revisiones periódicas podrás mantener su salud fuerte durante toda su vida.

2.- Adapta su dieta

El famoso dicho 'somos lo que comemos' se aplica también a nuestros amigos peludos. Por eso, es muy importante elegir una alimentación de calidad y adecuada para cada una de sus etapas. Cuando pasan los años, los perros pueden volverse menos activos y su metabolismo se ralentiza. Como consecuencia, pueden aumentar de peso. También sus dientes se resienten. Para evitar problemas por mala alimentación, adapta su dieta a sus necesidades nutricionales y cuenta con el asesoramiento de un experto para ello.

3.- El ejercicio es fundamental

El aumento de peso y la falta de actividad puede ser un problema. Aunque tu compañero ya no tenga la misma energía que cuando era un cachorro, sigue necesitando moverse y ejercitarse para mantenerse fuerte. No obstante, es posible que tengas que reajustar la intensidad y duración de los paseos, pero mantenerlos en su rutina es imprescindible para su salud física y mental. Además, puedes complementarlo con el uso de juguetes interactivos que beneficien su cognición.

4.- Cambios en el comportamiento

Siempre es necesario prestar atención al comportamiento de tu perro, pero cuando es mayor, lo es todavía más. Algunos cambios son normales y no deben preocuparte, como la necesidad de más horas de descanso, el cambio en la rutina de sueño o cierta falta de energía. Sin embargo, podrían ser indicativos de que algo no anda bien, como los problemas para controlar la vejiga. Si observas alguna conducta extraña que te preocupa, consulta rápidamente con el veterinario.

5.- Un entorno seguro

Un aspecto fundamental para el bienestar de los peludos más mayores es que el espacio esté adaptado a ellos. Elige un comedero y bebedero adaptado para que sus huesos no sufran, elimina obstáculos y dispón todo lo que pueda necesitar en un área sin escaleras. Además, puedes elegir una cama o cojín que se ajuste a su cuerpo y permita un descanso óptimo.